Truenos.
Comenzó una tormenta incesante que hizo que despertara ¿Dónde estoy? ¿Qué esta sucediendo?». Me encontré tendido en la tierra húmeda, tenía todo el cuerpo empapado por la fuerte lluvia, no llegaba a reconocer mi entorno totalmente, estaba atrapado ¿Cómo había llegado a ese lugar? y sobretodo ¿Cuál era "ese lugar"?
Mire a mi alrededor en busca de algún refugio para salvarme, y con éxito, vi una luz brillar y girar a lo lejos de la oscuridad de aquel bosque.
- Espera... Ahí esta el faro... - me dije a mi mismo - Estaré a salvo si puedo llegar allí.
Camine sobre unos viejos trozos de madera incrustados en la tierra, apenas podía avanzar, aquel viento, generado por la tormenta, se volvía más fuerte a cada paso que daba, era una lucha entre la naturaleza y yo, con el único propósito de llegar al faro y permitirme estar a salvo.
«Mierda»
Había llegado a la cima, y lo primero que llegué a visualizar fue una especie de huracán tomando más y más fuerza a cada segundo que giraba.
Y en eso, un bote salió disparado de tal fenómeno, impactando contra el faro y haciendo que este se rompa, cayendo sobre... mi.
No podía ser posible, eso no estaba sucediendo.
- ¡Wow! ¡No!
