¿Otra vez tu?

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El fin de semana habia pasado lento y aburrido, en este pueblo casi no habia centros comerciales y eso era aun mas aburrido, habia ido a comprar las cosas que me faltaban para la escuela y acompañe a mi madre a su trabajo.

Hoy decidi irme caminando a la escuela, para ver si encontraba algo interesante en el pueblo, de tanto que iba bobeando no me di cuenta que ya habia llegado a la escuela y que una moto casi me atropella.

Me quede en mi lugar en shock sin saber que hacer, el tipo de la moto se acerco a mi sin quitarse su casco y me tendio una mano, yo la tome y el me levanto.

-¿Te encuentras bien? Perdon me fallaron los frenos, pero tu tampoco ibas poniendo atención.-me dijo hechandome la culpa, me moleste, aunque tenia razón.

-Esta bien, no te preocupes, deberias de reparar tu moto, no se te vaya a cruzar otra estupida como yo y ahora si la mates.

-No quise decirte asi.-dijo con un tono de preocupación.

-No importa así dejalo ya.-fue lo único que le dije y me diriji al salón de historia.

Genial lo que me faltaba.

La vez que me asignaron asiento en historia no estaba mi compañero al parecer había faltado, a ver si hoy también falta.

Se empezó a llenar el salón y mi compañero aun no llegaba, poco después llego la maestra y empezó la clase.

Unos minutos después llego un tipo bastante guapo, su cara se me hacia conocida.

La maestra le dijo algo que no alcanze a escuchar y el se dirigió a donde yo estaba sentada, ¡Oh por Dios!, una vez que lo vi de cerca me di cuenta de quien era.

Es el tipo que me fue a hablar el día que salí a caminar para conocer el lugar, ahora me daba vergüenza verlo, lo trate de una manera tan estúpida, espero y no se acuerde de mi.

-¿Otra vez tu?.-dijo el sorprendido.

-Lo siento creo que me confundes.

-No, tu eres la que estaba la otra noche en la banca y la que iba a atropellar esta mañana.

Bueno al parecer el del casco era el, Alicia otra vez lo trataste pésimo.

-Oh bueno, si, yo soy la estúpida que no estaba poniendo atención en su camino, mucho gusto.-Alicia deja de ser tan estúpida una vez en tu vida por favor. Mi conciencia tenia razón.

-Me llamo Key Holmes, y la verdad nunca quise decirte así, te agradecería bastante si dejaras de decirte estúpida, por cierto mucho gusto.-sonrio, su sonrisa era perfecta, y sus labios eran tan carnosos y perfectos que daban ganas de morderlo y besarlo todo el tiempo.

¡Alicia concentrate!

-Me llamo Alicia Everly.-fue lo único que dije.

-Que hermoso nombre, igual que tu.-me guiño un ojo, haciendo que me pusiera roja.

Odiaba que me guiñaran el ojo, yo no podia, cuando intentaba parecía que tenia un tic.

Me dedique a poner atención, me daba pena que me viera toda roja, si es que aún lo estaba.

El día estaba tranquilo, ya había llegado la hora del almuerzo y estaba sentada con Sofia.

Alguien puso una bandeja a lado de Sofia, yo solo junte las cejas y levante la cabeza, genial era Key.

-Hola.-le dijo a Sofia y la beso en la frente.

Yo solo junte aun mas mis cejas que ya empezaba a dolerme.

-Ohh lo siento Alicia, se me olvido presentarlos.-dijo Sofia al ver mi cara.-El es mi hermano Key, Key ella es Alicia.

No puede ser, pero no se parecen en nada, de seguro eran adoptados.

-Ya nos conocíamos.-le dije a Sofia.

-Estoy pensando en hacerla tu cuñada Sofi.-le dijo Key a su hermana con una gran sonrisa, su sonrisa perfecta.

-¿En serio?.-le pregunto sorprendía, luego volteo hacia mi.-Suerte Alicia.-luego me guiño.

Hay como odiaba que hicieran eso.
Ante lo que dijo Key yo solo me digne a comer, a penas si me conocía y decía eso.

-Alicia, ¿que te parece si hacemos una pijamada en mi casa?.-me dijo Sofia entusiasmada.

¡Es en serio, una pijamada en la casa de los Holmes!
Alicia, la pijamada es con Sofia, no con el guapo de Key, aun así uno no sabe lo que puede pasar.

-Claro Sofia, me mandas la dirección por celular.

Voltee a ver a Key, quien me veía divertido y empezó a subir y bajar sus cejas.

Solte una risa y me fui directo a mi casillero, para tomar las siguientes clases.

La verdad no era tan malo ser amiga de los Holmes.

Las clases habían terminado y camino a casa me acorde que no tenia pijama, me acorde de una tienda donde vendían varia ropa, cheque si tenia dinero y si, me dirigí a la tienda.

Tangas, shorts, pantaloneras, no sabia que decidir, mi ojos fueron a una pijama que me encanto, era un short no tan corto, con una blusa mas o menos larga, que decía; enamorate de mis demonios, la pijama era sexy a la vez pero no tanto, simplemente era perfecta.

Recibí un mensaje de Sofia, donde me decía la dirección de su casa y que me decía que sus padres no estarían ahí.

Me dirigí a mi casa a alistar todo y le enviaba un mensaje a mi madre que iría a una pijamada.

Llego el momento.

Hola espero que les este gustando la historia, tratare de subir capítulos seguidos estas semanas que me quedan de vacaciones, por favor diganme que opinan. Se que entre mas capítulos suba mas les gustara:)
Dejen su opinion en comentarios se los agradecería muchísimo.

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