"I care of you" |l.s.|

Capítulo 1

Harry pdv.

Era el quinto día de trabajo, todo iba aburrido y cansador. Necesitaba reintegrarme a algunas de esas fiestas que realizaba Kaith en su casa. Eran lo mejor, yo lo pasaba magnífico y también me relajaba ahí, pero claramente el trabajo es primero.

-Styles- escuché que me llamaban por la espalda, y cuando volteo, veo las caras conocidas de Noah y Matt.

-Hey, ¿que tal? Que bueno verlos- confesé alegre.

-Venimos por comida bro ¿nos atenderás?- contestó sonriente.

-Eh si claro, ¿que pedirán?- los miré de reojo con una libreta en la mano.

- Dos cajitas y una gaseosa grande aparte.- habló Matt con voz autoritaria.

Anoté lo que pidieron y hablé por el micrófono que daba sonido en la cocina donde preparaban los alimentos adictivos.

Dicté lo que ellos pidieron y conversé un poco más con los dos. En unos minutos llegaron sus pedidos y llevaron la bandeja a la pequeña mesa del fondo.

Mientras yo atendía la larga fila, me llama mi padre, tendrá que esperar unos minutos. Ya no puedo con esto, estoy con mucho cansancio ahora mismo.

Terminé de atender y luego Matt con Noah se acercaron al mesón para despedirse.

-Adiós Harry, que te vaya bien princesito- dijo Matt con voz burlona y una sonrisa en la cara.-yo me largo de aquí-

-Adiós Styles- se despidió Noah con un choque de manos.

-Hasta luego MN vuelvan cuando se les dé la gana- me despedí igual. Y salieron del local.

MN les decía a ellos por Matt y Noah, siempre se la pasan juntos, así que fue necesario el sobrenombre.

Cuando terminó mi turno, fui de retorno al baño y saqué por encima el delantal rojo que llevaba una "M" amarilla estampada, para reemplazarlo por un sweater que tenía la caricatura de mickey mouse, y en la cabeza me acomodé un beanie negro que me regaló mi abuela materna.

Salí de ahí dentro y me dirigí al auto, tomé las llaves del bosillo trasero de mi pantalon y me metí adentro ya que tenía un frío de la muerte.

Llegué al departamento, colgué mis llaves para ir al baño y darme una ducha caliente para relajarme. Me jaboné lentamente y lavé mi cabello con shampoo de bananas.
Saqué una suave toalla del ropero, me envolví en ella y fui de vuelta al cuarto.

Me puse un boxer azul, con lunitas, para dormir.
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Había pasado ya una semana de que Harry estaba trabajando y todo iba aburrido y estresante, como todo lo era para él. Ya no le alcanzaba el tiempo para hacerle una visita a su padre, solo tenía tiempo para fiestas y alcohol.
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Eran las 8 a.m y sonó mi despertador. Me levanté, removí algunos rulos molestos de mi cara y me bañé para después hacer un cambio de ropa e ir a trabajar, como la rutina de los mayores.

Hoy llegué al trabajo con calor y sudor en la frente, así que mi día iría bien, supongo.
Me poscicioné en la caja y cuando menos me lo espero ingresa Noah con un chico, nunca lo había visto, debe ser un amigo de fiestas.

- Styles- me palmeó.

-Hey ¿como andas?, ¿quien es el chico?- pregunté en voz baja.

- Ah si, el es Louis el chico más tierno de la vida.- me responde y lo llama- ¡Louis! ven que te presento a mi amigo- El chico da vuelta y le muestro mis hoyuelos, pero el se puso algo serio.

- El es Harry, mi amigo de la escuela- me apunta sonriente- y... Harry el es Louis un amigo de fiestas.- nos damos la mano y me pierdo entre la suavidad de la mano del chico, es tan suave como un algodón. Dios.

- Bien, queremos una soda antes de irnos de paseo al museo que nos queda por acá cerca.- me dice Noah, mientras sigo pensando en la mano de Louis.

Salgo de mis pensamientos y respondo.
-Eh, está bien, las traigo en un momento.- lleno los dos vasos, saco los tubitos y les entrego uno a cada uno.

-Acá está la boleta y hasta luego chicos pasenla bien.- me animo a comentar.

-Adios Styles, mucha suerte con las papas fritas- se despide Noah riendo y Louis me saluda con la palma y ahora una sonrisa perfecta.

Y vuelvo a mi pensamiento.
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¿Desde cuando me he enamorado de una mano? Y ahora de una sonrisa perfecta. Creo que me estoy volviendo loco, ese chico tiene unos ojos azules que matan, es suave y tierno, debe ser simpático, creo que debería volver a verlo y conocerlo un poco más. Aunque se me hace difícil, gracias al trabajo.

*16:00 *

Esta noche iría a casa de Kaith, habrá una fiesta y estará Matt con su novia. Espero que esté allí Noah, la paso increíble con él, es un buen amigo y yo lamentablemente, soy lo contrario.
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Hoy no llevé mi auto al trabajo y tuve que volver caminando, pero no regresé al departamento. Caminé hacia el centro comercial por ropa nueva. Compré unos skinny jeans ripped y una camisa holgada, siempre compraba una tenida al mes, soy adicto a las prendas, parecido a las mujeres.

*22:00*

Estaba tomando una ducha cuando mi celular empieza a timbrar. Salía Matt en la pantalla, pero no podía atender mojado.
Me acomodé en mis nuevas prendas y tomé rumbo a la casa de Kaith, no quedaba muy lejos, pero si estaba muy cansado para caminar, así que tomé mi auto.
Manejo en destino a una casa muy conocida, asi que avanzo tranquilo y suave.

Las calles están mojadas y llenas de luces navideñas aunque faltara un mes para que la fiesta se realizara.

Aprieto el pedal de frenos apenas veo la señal que está en rojo y aprovecho de encender la calefacción. Dio verde y arranqué mi auto. Ya faltaba una cuadra para llegar así que guardé dinero en mi bolsillo y unos cigarrillos que compré hace dos semanas, ahí se nota que he ahorrado y tambien que he dejado el vicio a un lado de mi vida.

Estacioné el vehículo en un lugar vacio y bajé. El ruido de mis botas resonaban en el pequeño pasaje en donde vivía Kaith, era un pasaje de millonarios como mi padre. Hasta que llegué y subí los escalones para apretar el timbre.

-¡Hey Harry! Que bien que hayas venido, está todo el mundo acá.- chilló Kaith.

-Hola Kaith, mucho tiempo sin verte- y me acerqué para depositar un beso en su mejilla.-¿puedo pasar?-

-No tonto te quedas afuera- bromeó. - pasa de una vez Styles- abrió la puerta completamente.

Ingresé y me ofrecieron un vaso de vodka con cerezas al instante, cosa que acepté de inmediato. Luego encontré a Matt y estuvimos hasta la media noche charlando de su nueva chica que estaba aquí presente, se llamaba Banie, y yo ya estaba aburrido. Los corté y me fuí cerca de un sillón grande de cuerina blanca, saqué un cigarrillo y lo encendí.

Ahora me encontré con Sally, la chica rubia que era una estúpida en la escuela, pero es buena persona, también charlé con ella casi una hora y media, hasta que nos despedimos para seguir con la fiesta.

-Harry, fue un gusto volver a verte esos ojos tan hermosos que matan a cualquiera- achinó sus ojos de felicidad.

- Eh... Si el gusto es mío Sally, hasta pronto, quizás te vea por aquí denuevo- La abracé y por detrás de sus hombros desnudos veo a una persona y mis ojos se van de su órbita. Dios santo ayudame.

¿Quien será?