Al fin es domingo, mañana empezarían las clases. La verdad estoy emocionada. No es que ame la escuela ni algo por el estilo, pero prefiero estar ahí, con mis amigos que aquí, en casa, sola, y aburrida.
En 10 minutos llega Liam, solo estará en casa unas 2 horas ya que su mamá le pidió que lo ayudara con algo de su trabajo.
Mientras estoy recostada en mi cama, escucho a Niall avisarme que Liam ha llegado a lo que yo solo le grito que lo haga pasar. Estoy muy agotada como para bajar y luego volver a subir. Además, ya sabe el camino.
Estoy apunto de caer en sueño, pero de la nada, un cuerpo se lanza enzima mío, seguido de un grito estruendoso que llena toda la habitación. Reacciono y abro los ojos de tope y trató de gritar, pero el aire se ecapa de mi estómago y no puedo.
- ¿¡Que demonios te ocurre Liam?!.- le pregunto muy molesta al darme cuenta de que él ha sido el bromista, a lo que el solo responde con una carcajada.- estas demente.- le digo lanzándole una almohada y dibujando una leve sonrisa.
.- Y quitate de encima, que no eres él hombre más delgado del mundo que digamos .- le digo riendo y tratando inútilmente de que se mueva.
- Oh, disculpe usted miss universo.- dice riendo y levantándose de ensima de mi.
Le respondo con un golpe en la espalda.-Que gracioso, Liam.- digo con sarcasmo y mirándolo mal.
-Bien, bien lo siento.- dijo sentándose en la orilla de la cama.- ¿Qué hacemos?, estoy aburrido, hay que hacer algo, estaré todo él día en casa ayudando a mamá a limpiar él sótano, ¿sabes cuán aburrido y agotador será eso?
- No Liam, no lo se , y...- dije sentándome en la cama y tratando de pensar en algo divertido-
.-¿Qué tal si vamos a molestar a Niall?- digo con diversión y una gran sonrisa. En verdad no hay nada mejor que ver molesto a mi hermano mayor.
-NO, no, no y no -dice negando una y otra vez con la cabeza y haciendo una exprecion aterrorizada.- la ultima vez que lo molestamos, YO fui él que recibió los golpes- dice recalcando el "YO". Y tiene razón, pobre,la ultima vez tuvo que aguantar un par de golpes en el brazo de pare de Niall. Mientras que yo reía al ver tan tonta escena. Lo se soy un amor.
.- Que nena eres Liam.- digo para que se moleste. Él sólo rueda los ojos e ignora mi comentario.
-¿Entonces qué hacemos? Señor delicado- dije burlona, a lo que él respondió dándome un leve empujón, haciendo que soltara una pequeñe risa.
-¿Qué tal si mueves tu trasero hacia la cocina y preparas algo para comer?. Tengo hambre, alimentame- dijo zarandeadome de los hombros.
Rodeé los ojos dirijiendome hacía la puerta.- Aveces pienso que solo me hablas por comida. -dije en tono enfadado claramente fingiendo, ya que yo también muero de hambre.
-Eso en verdad que es mentira Amara, somos mejores amigos desde que te defendí de ese niño gordo que quería quitarte tu almuerzo.- Dijo detrás de mi, mientras caminamos a la cocina. La comisura de mis labios formaron una sonrisa ante su argumento. Eso era más que verdad, desde ese momento Liam se había convertido en mi protector, claro que cuando teníamos 8 años no sabíamos tanto de la vida y que era lo que significaba la palabra protector, pero al pasar de los años siempre fue asi, me cuida mucho, en verdad agradezco mucho eso.
.- Bueno eso y que además preparas unos pasteles deliciosos. - Dijo llegando a la cocina y apoyándose en la barra que hay al frente de la estufa.
Negé con con la cabeza con una gran sonsisa en mi rostro y Liam soltó una risa burlona.Rápidamente saco todo lo que necesito para preparar unos ricos panqueques. Tardó un poco al terminar los primeros tres, pues mi ayudante Liam se ha dado a la tarea de distraerme a cada momento.