Capitulo 3

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El camino al aeropuerto fue muy lento. No podía sacarme de la cabeza a Eric, lo odio, juro que lo odio y me odio a mi misma por no poder superarlo.
Susan sabia que estaba mal, y trataba de hablar de cualquier cosa para distraerme, pero no podía.

Antes de llegar a la sala de embarque Susan me agarra de la mano y me detiene.
-Marlene...
-Oh no... ¿Que sucede?- Cuando me llama por mi nombre es porque va a hablar seriamente- ¿Te olvidaste algo? ¿Los pasajes?- Me siento en una silla del café que estaba al lado del baño para buscarlos en mi cartera.

-No, no- Me detiene- Solo quería pedirte un favor, pero es muy importante para mi-

-Claro, de que se trata?

-En el hotel vas a dormir conmigo

-¿Qué?- No entiendo- ¿Por qué? Es por la plata? Me dijiste que no me preocupara, te hubiese ayudado o hubiera pagado otra habitación.

-No es eso, hay dos habitaciones, pero quiero dormir contigo- Wow, eso sonó raro- Y sobre la plata, sabes muy bien que es tanto mía como tuya. Así que tu también aportaste.

Hace siete meses mas o menos me acosté con un hombre que tenia una empresa de arquitectos e iba a hacer una nueva oficina y necesitaba un cuadro para colgar en la pared, porque todos los que había visto eran horrendos para el. Yo le conté que tenia una amiga que pintaba y que era realmente buena, entonces le pase su número de teléfono.

Luego me desperté en su cama y me fui antes de que se despertara, sin dejarle ninguna nota.

A la semana Susan llego a mi casa diciéndome que tenia un trabajo muy importante y quería que la acompañara.

Cuando llegamos a la empresa, lo vi. Susan se reunió con el, pero yo me inventé un excusa y me fui. Cuando Susan terminó su cuadro, era hermoso, era un atardecer de 1x1,5 metros. Ella se lo entrego a su secretaria un día antes de la fecha en la que habían concordado y le dijo que le enviaran el cheque con el pago a mi casa porque ella tenia que volver a la suya, ya que su mamá se cayó y estaba en el hospital, por suerte no fue nada grave.

Cuando me llego el cheque a casa vino acompañado de una rosa y una nota para mi en la que me invitaba a cenar. Decline la oferta y por suerte lo entendió. En el momento en que Susan vio el cheque casi se desmaya y cuando me lo mostró casi me desmayo yo... No era el precio que habían concordado, era el triple.

Luego volvió a su casa para seguir cuidando a su madre, pero antes de irse me prometió que íbamos a usar ese dinero... Y aquí estamos.

-Hey, vas a dormir conmigo?- Gritó, y vi como una viejita se dio vuelta para mirarnos y puso cara de asco.

-¿Tu quieres dormir conmigo? No me digas que eres lesbiana y que siempre estuviste enamorada de mi y que quieres que adoptemos a un niño de cada continente y que le pongamos nombres de personajes de libros, como Patch o Travis... Mmm babeo- Lo digo todo tan rapido que tengo que tomar aire al terminar mientras Susan empieza a reír.

-No puedo creer la imaginación que tienes- en un segundo puso cara seria- Pero hablando en serio, no quiero sexo en estos siete días- Justo cuando dijo eso paso la misma señora de antes, pero estas vez casi se pone a correr para alejarse de nosotras- Por favor, solo nosotras, sin sexo.

Estoy a punto de responderle cuando nos llaman para embarcar y a Susan le suena el celular.

-Ve llendo a la fila, yo te alcanzo en un minuto, es Martín, no puede vivir sin mi- Me río por lo que dijo ya que en realidad ella no puede vivir sin el.

Me dirijo a la fila, por suerte no hay tantas personas aún, cuando falta una persona para que me toque a mi veo que se acerca un hombre, pero que hombre, pelo negro, los ojos no los distingo, pero el cuerpo... Por Dios!! Se le notan los músculos debajo del traje que lleva puesto. Que lindo seria sacárselo y...

-Señorita, acerquese por favor- me interrumpe un guardia.

-Disculpe, aquí tiene- Le digo enseñandole mi pasaje y pasaporte.

-Oh, señorita, disculpe las molestias pero le importaría si le cambiamos el asiento por uno que tenga ventanilla, por favor.

-¿Por qué?- No es que no quiera, me encantaría ver por la ventanilla pero espero que sea por una buena causa para no viajar con Susan a mi lado.

-La razón es que es la primera vez de una señora en un avión y no quiere ver por la ventanilla- Oh pobresita, a mi también al principio me daba miedo.

-Bueno, esta bien, acepto- Antes de entrar me corro a un costado para llamar a Susan, pero me dice que esta ocupado así que decido mandarle un mensaje.

*Su, me cambiaron el asiento con una señora xq es la primera vez q sube a un avión, no te asuste si no me vez al lado tuyo. Te veo cuando lleguemos. :*  *

Cuando termino de escribir veo que el hombre que vi antes esta mostrándole el pasaje a la chica que antes me atendió a mi, y en un momento me mira y veo que tiene unos ojos hermosos, son verdes con manchitas color caramelo, es perfecto.

Yo decido esperar un rato para ver si Susan contesta, pero al pasar cinco minutos decido entrar. Lo único que espero es que este viaje sea tranquilo.

Tengo dos opciones después de lo que le prometí a Susan, que no me encuentre con nadie muy lindo para no caer en la tentación, o que Susan encuentre a alguien para ella aunque eso es imposible porque ese hombre se queda acá, ella ya lo conoce, y ahora está hablando con el.

Solo me queda mantener la cabeza fría, hombres van y vienen, ninguno es perfecto, siempre va a aparecer otro. Espero que no me pase eso seguido ahora porque no quiero romper la promesa.

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⏰ Última actualización: Aug 07, 2019 ⏰

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No quiero amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora