ANDREW DOST(5)

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Años después, aunque tocábamos en sitios mejores que el jardín, bares, restaurantes, pequeños teatros de la ciudad, decidimos dejarlo, porque Tom, el batería y Peter, el cantante habían hecho sus vidas, pero yo no.

Todos nos olvidamos. Y yo, empecé a estudiar en la universidad, y a pasar las tardes en la residencia, con un trabajo de reponedor de supermercado. Necesitaba ahorrar, para comprar un piano. Me encantaba el piano.
Todo esto sucedió durante un año entero.

Entonces, una noche, me dió por salir a tomar algo, pero yo solo. Me gusta recapacitar sobre mi pasado en soledad, que, aunque parezca triste, aún sigo siendo muy divertido.

Entréa un bar antiguo, en el que había un grupo tocando. Qué gracia... Se parecía al mío...

Me senté en la barra, al lado de un chico de mi edad, con gafas. A él también pareció gustarle aquel grupo. Incluso se podría decir que también le recordaba al suyo, fruto del pasado.

Entonces le pregunté:
Que, ¿te gustan?
-Sí, son bastante buenos, la verdad...
-Dijo con un tono triste, y carraspeando.
¿Pasa algo?
- Bueno... Esque me recuerdan a mi, y mi antiguo grupo...
-¡LO SABÍA!
Yo también tenía un grupo... Pero hace ya un año que no nos vemos...
-Se lo que se siente. Oye ¿vienes a saludar al grupo?
-Claro.
Cuando terminaron de tocar, el chico y yo, nos acercamos al grupo y saludamos al cantante.
- Oye, habéis estado muy bien. ¿Cómo os llamáis?
- Ah gracias... Nos llamamos "The format"
- Parecía que a él también se le notaba un poco triste. Tenía la mirada caída, y desganada, cosa que no había notado en el escenario.
-¿Te pasa algo? -Dijo el chico de las gafas.
-Nada... Es solo cansancio.

-Nos quedamos un rato charlando, y nos tomamos unas copas en la barra. Eran las tantas, cuando el camarero nos dijo que iban a cerrar. Así que nos fuimos.

Los chicos estaban bastante bebidos, pero yo no, así que tube el suficiente conocimiento como para ir a cojer un taxi para los dos.

De camino al taxi, le pregunte al de la banda, que si le pasaba algo, sabía que este era el momento de saber la verdad, porque estaba borracho.

Él, se paró, y las risas cesaron. Entonces, fue cuando dijo, que su banda se estaba esfumando, y que pronto la iban a perder.

Era una gran casualidad que los tres estuviésemos sin banda. Y, de repente, Jack dijo...
-Oye! ¿Y si quedamos los tres algún dia para tocar?

-Pero, ¿cómo? ¿Acaso vosotros sabéis tocar?

-Claro que sabemos
Dijimos el chico de las gafas y yo.
Entonces, nos dimos los números de teléfono, a las puertas del taxi. Y antes de que se subieran, el chico de la banda dijo..

-Por cierto, soy Nate.
-Y yo Jack
-¡Yo soy Andrew!
Grité mientras veía al taxi desvanecerse entre la niebla.

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