Keith: Dijiste que venías al comedor.
Detengo el sándwich a medio camino de mi boca y lo vuelvo a dejar sobre la mesa.
Keith estaba esperando que apareciese en el comedor. Quizás quería que nos conociesemos.
Nora: ¿Me estabas esperando?
Keith: Eso no viene al caso. ¿Dónde estás?
Nora: Harry estaba en la entrada de la cafetería de la universidad, así que he ido a otro local.
Permancezco varios segundos esperando a que escriba su respuesta, pero parece indeciso. Escribe, borra. Vuelve a escribir, vuelve a borrar.
Keith: ¿Aún no has hablado con él?
Nora: ¿Debería?
Keith: Demonios, ¡no! Las oportunidades para mi, por favor.
Miro la pantalla del móvil fijamente sin saber cómo interpretar eso.
Nora: ¿A que te refieres?
Keith: Eres preciosa.
Mi cerebro tarda en procesar el cumplido. No suelen decirme cosas así, ni siquiera por WhatsApp.
Nora: ¿Estás coqueteando conmigo?
Keith: Ojalá pudiese decir que sí, pero no lo intento. Jamás te fijarias en mi.
Nora: Mi última relación fue con un capullo. ¿Crees que tengo el listón muy alto? Estoy segura que eres mejor que Harry.
Visto a las 2:31pm.
Mierda.
Quizás he sido demasiado ruda.
Pienso unso segundos en algo que pueda aligerar el ambiente.
Nora: seguramente me viste borracha. Cualquier otro chico me hubiese llevado a su casa para aprovecharse de mi embriaguez.
Keith: Confieso que estuve tentado de llevarte a mi casa.
Nora: Llévame. No tengo clases esta tarde. Quedemos. Déjame conocerte.
Visto a las 3:07pm.
Ese visto cada vez me jode más.
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Lo que esconde tu sonrisa.
Short StoryNora piensa que todo le sale mal, que está sola, que todo se ha ido a tomar viento. No tiene motivos sonreír, no hasta que un misterioso Keith le hace ver el lado bueno de las cosas. Él la conoce. Ella a él no. Ella quiere conocerlo. Él quiere el an...