Me desperté con un dolor de cabeza y de espalda. Abrí los ojos esperando que todo lo del internado hubiera sido un sueño, pero no, esto era real. Odiaba dormir en camas que no eran la mía, hasta que no me acostumbrara a dormir en aquella cama, no se me pasaría.
-Buenos días.- sonrió Maddie.
Yo sonreí y me senté en el bordillo de la cama. Nos tocaba bajar a desayunar y después empezaban las clases. Me hice un moño desecho y me fui a lavar la cara mientras Maddie se hacía una coleta alta.
-¿Bajamos?.- pregunté.
Ella asintió cerró la puerta de la habitación. Estabamos caminando hacía el comedor cuándo alguien me golpeó en el hombro, era Carol. Odiaba a esa clase de chicas, a las que trataban con indiferencia a los demás y que se creían el centro del universo.
-Eh tú.- grité.
Carol se giró y hizo cómo si no le hubiera dicho nada.
-Eres una pedazo estúpida.-le volví a gritar.
Carol se giró y vino directa hacía mi, pero alguien la consguió parar, Zayn. Él la sujetaba mientras que Maddie me cogió del brazo y me llevó lejos de allí. Zayn no paraba de mirarme, no era una mirada amable, si no lo contrario.
-Lena, por poco Maddie te arranca la cabeza.-dice Maddie.
-Tranquila, le hubiera dejado sin esas pestañas de plástico que lleva.- le respondí.
Maddie se rió y entramos en el comedor. Era bastante grande, lleno de bancos y de mesas. Cogimos el desayuno y nos sentamos. Maddie me contó que estaba en el internado porque sus padres fallecieron en un accidente de coche cuándo era pequeña y que llevaba en el internado bastantes años ya.
-Lena, vamos a dar una vuelta por el jardín, hoy es sábado, no hay clases.- dijo Maddie guiñandome un ojo.
Ella y yo paseamos hasta una especie de lago gigante. No me había dado cuenta que el internado era tan grande. Maddie era la única chica del internado que me caía bien, era muy parecida a mi, siempre se metía en líos, no hacía caso, era cómo una espécie de hermana.
-Vosotras dos.- dijo una voz grave detrás de nosotras.
Nos giramos y vimos a Zayn y su amigo Harry. Nosotras nos levantamos rápidamente y yo puse una mano en mi cadera y Maddie cruzó los brazos.
-Qué queréis pedazo de...-dije-
-Eh, relajate o si no..-dijo Zayn.
-O si no qué ¿Me vas a pegar?.- pregunté.
-Harry cogela, quiero hablar con ella seriamente.- dijo Zayn.
-Cómo la toques te meto.- dijo Maddie a Harry.
Maddie miró desafiante a Harry y él la cogió de las muñecas y la apartó lejos de mi. Zayn vino corriendo y me cogió de la cintura. Maddie le gritaba a Harry que la bajara mientras que yo le chillaba a Zayn.
-Que me bajes hijo de puta.- gritaba Maddie.
Zayn me llevó lejos de Harry y Maddie y me bajó haciendo que me cayera al suelo de golpe.
-Pero tú eres idiota o que te pasa.- le grité.
-Hay varias cosas en el internado, varias reglas.- dijo Zayn.
-Yo nunca obedezco a las reglas.- gruñí.
-Una de ellas es que si no cumples las reglas, habrá castigos.- dijo Zayn.
-¿Y quien me va a castigar?¿Tú y tus amigos? Venga ya.- dije a Zayn.
-La primera regla es que no se puede insultar ni pegar a nadie de nuestra banda, la segunda es que está prohibido entrar en nuestras habitaciones y la tercera es que si incumples estas reglas, los castigos que habrán son muy dolorosos.- susurró Zayn.
-Uno eres un gilipollas, dos, me importa una aunténtica mierda tu habitación y tres a mi no me vas a tocar ni en tus sueños ¿Te ha quedado claro, señor Zayn?.- le respondí levantandome y limpiándome las hierbas que había en mi pantalón.
Zayn me cogió del brazo y me apoyó contra un árbol, quedando a centímetros el uno del otro. Podía notar la respiración de Zayn como entraba bruscamente por su nariz y salía lentamente por su boca.
-¿Porqué eres así?.-preguntó Zayn.
-Porque no soy como las típicas chicas de aquí, yo no voy enseñando las piernas, poniéndome kilos de maquillaje en la cara y haciendo la pelota a la gente cómo tú, no soy así y no voy a cambiar porque un estúpido me diga que debo de seguir unas estúpidas reglas.- le respondí.
Pude oir como Harry venía corriendo con Maddie sobre el hombro y ella le seguía insultando y gritándole que le bajara.
-Zayn viene Muriel.-gritó.
Antes de que pudieramos correr, la directora Muriel estaba delante nuestra con una cara de pocos amigos.
-Vosotros cuatro estais castigados esta semana, sabéis que no se puede pasear por este sitio si no tenéis una autorización de salida, así que como castigo limpiaréis el comedor después de cada comida, empezaréis hoy en la cena.-replicó Muriel
Muriel se fue dejandonos solos con ellos dos. Era mi primer día aquí y ya me habían castigado, si que había empezado pronto mi rutina.
-Sois unos imbéciles, si no hubierais hecho ruido Muriel no se hubiera enterado.-dijo Maddie.
-Vamonos, no quiero ver a estos dos hasta la hora de cenar, por desgracia.-dije con una cara de asco.
Nos fuimos de allí mientras Zayn y Harry veían cómo nos íbamos. Fuimos ha nuestra habitación y nos tumbamos en la cama.
-Oye Lena, hoy hacen una fiesta, es sábado, ¿Te apetece ir?.- me preguntó.
-Claro, porque no.- sonreí.
Ya era la hora de cenar y bajamos rápidamente para subir y arreglarnos un poco para esta noche.
Antes de entrar al comedor estaba Muriel.-Acordaros que hoy os teneis que quedar a fregar y a limpiar y cuándo acabeis podréis ir a la fiesta al igual que Zayn y Harry.-replicó Muriel.
-No me acordaba.-gruñó Maddie.
Cuándo toda la gente acabó de cenar subieron a su cuarto a arreglarse y nosotros cuatro nos quedamos a fregar y a limpiar. Muriel entró en el comedor. Señaló a Harry y a Maddie para que limpiaran el comedor y a mi y a Zayn nos dijo que fregaramos los platos.
-Genial que guay.-dije con ironía.
-Súper mega guay.-dijo Zayn con ironía.
Él y yo entramos dentro de la cocina, yo ponía el jabón y el aclaraba los platos. Ninguno de los dos hablaba, solo nos limitabamos a fregar.
-¿Porqué vinisteis a buscarnos?.-pregunté yo de repente.
Zayn se me quedó mirando y a los dos minutos respondió.
-Porque aquí hay unas reglas y por la mañana con Carol no las cumpliste.- respondió.
-Ah claro, perdón por decirle la verdad a tu novia.-le respondí.
Zayn se me quedó mirando fijamente y sonrió.
-Eres un estúpido.-respondí dándole el último plato que quedaba por fregar.
Salí de la cocina y llegué al comedor. Maddie y Harry se estaban insultando.
-Maddie ¿Nos vamos?.-pregunté.
En ese momento salió Zayn de la cocina. Era tan guapo, pero a la vez tan estúpido. Maddie asintió y nos fuimos arriba a cambiarnos para la fiesta.
-Nos veremos allí ¿No?.-gritó Zayn mientras sonreía.
Yo le miré fijamente y subí a la habitación.