Fingiendo

7. Amistad.

Fueron muchos días, muchas semanas más después del suceso ocurrido con el novio de Kia. Ro no sabía nada de ninguno, sólo los veía en clases.

Pero hoy sería diferente, estaba dispuesta a hablarle, quería saber porque su repentino cambio, necesitaba que todo volviera a ser como antes, lo pedía a gritos.

Caminó al casillero de Kia, pero una escenita la hizo parar en seco, era un discusión acalorada entre Ro, la presidenta de la sociedad de alumos y su novio o al parecer ex novio. Sabía a que iba esto, los descubrió. Ellos ya habían captado la atención de todos.

Rose tenía un sentimiento de culpa inmenso, porque si le hubiera dicho algo, esto hubiese pasado hace semanas.

— Eres una puta.

— No querida, no es mi culpa que no pudieras satisfacer a tu novio y tuviera que recurrir a mi. Si me entiendes, ¿Verdad?

— Te acabas de llamar prostituta, idiota.

— Podrían no hacer esto aquí, por favor —susurró el causante del problema.

— Cállate —gritaron ambas a la vez.

— Hasta aquí llegó lo nuestro, que te quede claro.

— Que bueno, porque no encontraba como decírtelo —dijo él frío.

Kia dio media vuelta para encontrarse cara a cara con Ro.

— Y tú —la señaló— sabías esto, que amistad mas falsa. ¿Cómo pude llamarte mejor amiga?

Kia se fue del lugar con una mirada expectante por parte de todos los presentes.

Ro, quería seguirla, pero... ¿Cómo sabía ella todo eso?