Mundo RPG

1. Llegue a la Ciudad RPG

Por alguna razon, siento que hoy no es mi dia de suerte.

-¡¡Detenganse en este momento, desgraciados!!- escuche esa agitada voz provenir por detras de mi.

Si, definitivamente hoy no es mi dia de suerte. ¿Acaso hice algo malo? ¿Hice enojar a algien y ahora tengo una maldicion? realmente no me sorprenderia si esto es obra de algun conjurador.

¡Pero encerio! ¡No le he hecho nada malo a nadie! ¡¿Entonces por que me pasa esto?!

Mi respiracion era violenta, ¿cuanto tiempo he estado corriendo? creo que ya son 50 minutos de carrera ¡¿este tipo no se pienza cansar?!

Detras de mi un sujeto que vestia un chaleco de cuero negro sin mangas, me perseguia. tenia un estilo que con solo mirarlo gritaba "soy un chico malo".

¿Quien le abra dicho que las perforaciones en la nariz y las orejas le queban bien? no pude evitar tener ese pensamiento mientras corria.

Pude notar los brazos con enormes musculos, estoy seguro que si me golpea en la cara estare contando ovejas durante tres dias.

-¡¡Maldito, detente y pelea como los hombres!!- el seguia bosiferando.

¡¡Olvidalo!! ¡¡No pienzo detenerme!! grite en mi mente y force mis canzadas piernas a continuar corriendo.

Cruce por el distrito comercial, creo que lo perdi entre la multitud, pero aun no me lograba relajar, para cuando detuve mi carrea estaba en un parque ayacente a la zona comercial.

-¡Ah... ah... ah!- yo respiraba con pesades debido al extenuante ejercicio.

-!Ah... lo siento...! ¿podrias soltarme?- escuche una debil voz junto a mi.

-¡Lo siento!- respondi apresuradamente mientras soltaba su mano. -¿Estas bien? ¿Estas herida?- le pregunte mientras veia como trataba de recuperar el aliento.

¡Es hermosa! Quede impactado por su belleza, un abundante y ondulado cabello negro hacia resaltar la tersa piel blanca de su rostro, llevaba puesta una camiceta negra, un chaleco rojo y una falda de igual color con unas zapatillas negras.

-Si, estoy bien. muchas gracias por ayudarme.- ella sonrio calidamente al decirme eso.

-No fue nada- respondi apenado mientras rascaba mi mejilla. -sabia que los maleantes eran peligrosos en la ciudad, pero no me imagine que hubiese uno tan estupido como para intentar hacerle daño a una chica en pleno distrito comercial.-

-Tampoco hay muchos que ayuden a una chica que no conocen.- me dijo eso ahogando un poco su risa. -¡fuistes de gran ayuda! nuevamente, gracias por salvarme.-

-No fue la gran cosa, yo solo pasa por ese lugar.-

Ciertamente, fue una gran coincidencia, yo estaba saliendo de una cafeteria cercana luego de compar un cafe y observe que ese sujeto intento forzarla.

Nunca me ha gustado ver que abusen de los demas, asi que no lo pence y embesti a ese sujeto, luego tome a la chica y sali corriendo con ella.

Ahora que lo pienso... perdi mi cafe en ese ataque, ah, hay se fue mi dinero. Necesito ir a registrarme, de lo contrario no podre consegir dinero.