Traición O Salvación... [Saga: La Nueva Era. Libro #0.5]

17. La Chica De La Pulsera

Hora: 4:01 pm.

Fecha: Febrero 20 del 2263.

Lugar: Las dimensiones.

- ¿Sabes cuanto tiempo he estado esperando? - pregunto Brooke retóricamente.

Alec cruzo la puerta principal con una gran caja llena de archivos, realmente esa era la única razón por la que tenia que esperar a Alec ya que sin esos archivos que el llevaba entre sus trabajados brazos, Brooke no podría trabajar, aun así Alec aprovecho la oportunidad.

- ¿Para que me esperabas nena? - pregunto Alec con una gran sonrisa en los labios mientras se divertía en ver como Brooke volteaba los ojos.

- Si, claro, pero ahora quiero los archivos - dijo con voz serena Brooke.

Brooke le sostuvo la puerta para dejar pasar a Alec desde la recepción y tendrían que cruzar todo abajo hasta llegar a su pequeña librería.

Después de unos minutos de que ambos cruzaban la puerta, una chica de 15 años cruzo el a lumbral de la recepción con pasos lentos y cansados. Su cabello esta completamente ondulado y de un muy extraño color caoba, su piel se encontraba entre la tonalidad blanca y bronceada, en su nariz se encontraban una delicadas pecas, sus son de ojos de un color verde oscuro y su iris a simple vista no se encontraba notable pero de cercas su iris era uno de los plateados mas brillantes que podría haber. Vestía unos pantalones pegados a las pierna, una manga larga azul marino y un suéter cómodo sin zíper.

Tratando de calmar su respiración la chica se acerco hasta la recepcionista Emma y esta apenas se inmuto a verla, con molestia Emma la vio y la despreciaba la vista solo por causarle trabajo.

- A que es lo que vienes chica? - le pregunto Emma aun chateando con un par de amigos por la pantalla.

- Estoy buscando a alguien - declaro la voz de la chica. Su voz era una mezcla entre miedo y enojo y para mala suerte de ella el miedo siempre le ganaba.

- En que servicio trabaja? - pregunto con voz irritante Emma, ahora alejando la vista de la pantalla y poniéndola sobre la chica.

- No se en que trabaja, - su voz se volvió baja y el miedo volvió a apoderarse de ella pero ella trataría de hallar una salida. - pero se su nombre. - se mordió el labio y sus ojos divagaron un momento en la puerta que se encontraba a un lado de la recepción.

Alec abrió y cruzo la puerta de la recepción y volvió por otra de las cajas, se fijo un poco en la chica pero no le llamo la atención ya que hijos de los trabajadores a veces venían por ellos o ellos tenían que ir ahí. Con fuerza tomo otra caja entre sus brazos mientras caminaba lentamente hacia la puerta.

- Cual es su nombre? - Emma volvía a contestar los mensajes de sus amigos.

- Kaled Fisher. - dijo con voz clara.

Alec estaba a mitad de cruzar el a lumbral de la puerta cuando ese nombre llego a sus oídos. Por debajo de la chaqueta su cuerpo se tenso, miro por encima de su hombro a la chica que acababa de decir aquel nombre, ella miraba directamente a la recepcionista con los ojos esperanzados. Alec se fijo bien en ella, incluso en las pulseras que tenia en ambas muñecas; algunas de ellas con estambre de colores azul vivo y otras de cueros y una cadena con dijes en ellos, cada uno de los dijes se mostraba diferente. Pero una de esas delgadas pulseras le daría una pista, atreves de un hilo de color purpura y con cuadros decía «TAMARA» cada una de sus letras se mostraban en mayúsculas y mostrando un color verde al igual que el de sus ojos.

Alec asintió para el mismo y cruzo el a lumbral por completo.

- No, aquí no hay nadie con ese nombre. - dijo Emma revisando rápidamente los nombre con la letra «K» que trabajaran en cualquiera de las áreas.