Capítulo 5

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Gastón ya esta en la puerta, esperando que le abra, con esa sonrisa reluciente y contagiosa, lo extrañe mucho, pero mucho encerio.

Le doy un fuerte abrazo y un beso en la frente, nos miramos y el me da un empujon bromeando.

-Hola preciosa, te extrañe. Estas linda hoy bebe- Gastón me mira fijamente, se da cuenta al instante de que algo me duele al tocarme el brazo pero no lo piensa mucho asi que no pregunta.

-Hola amor, yo te extrañe mas. ¿Cómo estas?¿Queres algo para tomar?. Te notó cansado-Respondo al mismo tiempo que me abraza, sus abrazos me dan tanta seguridad, es como un don que tiene, al abrazarme algo en mi cambia, pero lamentablemente solo por momentos.

-Bien, ¿Vos cómo estas?, te noto decaída, auanque estas hermosa, pero como triste- Gastón siempre tan atento, lo quiero tanto.


Después de sus preguntas molestas y tratar de convenserlo de que estoy bien y tranquila, se olvida y nos vamos a mi habitación. A cada rato me agarra de las muñecas para que yo no lo pueda sacar de encima, hago muecas de dolor pero él no las toma, es raro, pero no importa, me daría mucha vergüenza que vea lo que me hice a mi.

Gastón me abraza fuerte en la posicion de "cucharita" y entonces su mano se desliza suavemente sobre mi cintura y baja hasta mis muslos, se me eriza la piel, me pone loca que me toque así, así como él solo sabe, esto es lo que necesito en este momento.

- ¿Qué queres preciosa?- Me susurra al oído, sabe que me encanta.

No digo nada, quiero que me toque, que me haga olvidar de lo malo. Entonces, giro, me doy vuelta para mirar su reluciente cara, esa cara que te transporta a un lugar donde el odio y la maldad no existen, me encanta mirarlo, es algo que me da mucha tranquilidad, su gran boca y su piel hermosa, no puedo estar con alguien tan perfecto. Este chico si me quiere y yo...yo me odio, pero siento eso que dicen que son "Mariposas en la panza", es una vibra lo que me hace sentir.

Me empieza a besar, me besa tan lento y siento tan bien su lengua que creo que voy a explotar, entonces ahi, justo en ese instante su mano su posa dentro de mi pantalon, y empieza a hacer magia con sus dedos. Yo lo quiero, lo quiero muchisimo.

Mi brazo se extiende hacia su ombligo, desde ahi mi mano por instinto esta dentro de su pantalon y no me di cuenta, estamos los dos locos. Me empiezo a agitar y siento su respiración aún mas agitada que la mia. Me encanta saber que se siente bien, le gusta lo que hago, le gusta que me guste lo que hace simplemente con sus dedos.

Al fin, acabamos al mismo tiempo, tengo que cambiar las sabanas antes de que llegue el malhumor.

-La puerta amor, yo voy- Gastón siempre queriendo hacer todo.

-Bueno, yo hago la cama imbécil.-Le respondo y ahi va mi famoso FUCK YOU.


Después de aguantar la cara de el malhumor, la despedida con Gastón, a mi profesora de Ed.Fisica, al final de todo siempre viene lo peor, el espejo, esa persona que me mira y llora, me duele.

Estoy cansada de todo esto, me odio, estoy gorda. Necesito estar con él.



Pensamientos que consumen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora