Cap. 14

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Volvimos a casa con la chica en mis brazos. Se veía muy extraña. La dejé en la cama de Mabel ya que Stan no quería que nadie entrara al cuarto de Bianca.
No podía dejar de ver a la chica. Era muy hermosa y al mismo tiempo me daba mucha curiosidad. Su piel era un morado muy claro y su pelo un morado fuerte. Me recordaba a Bianca pero Stan decía que Bianca murió en la explosión por salvarnos.
Stan llegó al cuarto cuando estaba sentado en mi cama viendo a la chica.

Dipper: ¿Qué es? -pregunté un poco asustado.

Stan: Es Bianca -dijo con normalidad viendo a la chica al igual que yo.

Dipper: Pero ella murió en el bosque -dije confundido.

Stan: No, ella sólo se mostró con su verdadera forma... En su nuevo cuerpo. Sólo que no quería decirlo en frente de Bill.

La chica despertó y pude ver sus ojos enormes ojos color morado intenso. Se talló los ojos y al ver sus manos gritó.

Stan: Bianca, tranquila. ¿Recuerdas de lo que hablamos la otra vez? -ella asintió viendo a su abuelo muy asustada- Está pasando...

Bianca: ¿Q-qué? No -decía ella mientras se veía las manos y luego me volteó a ver-. ¿Dipper? Por favor no te asustes -decía acercándose poco a poco hacia mi.

*Narra Bianca*
Cuando me iba acercando poco a poco hacia Dipper, noté que se hizo para atrás haciéndome sentir un fenómeno.

Dipper: Bianca... Yo... Lo lamento. No era mi intención -dijo intentando reparar su error.

Bianca: No. Está bien. Yo debería irme y dejarlos en paz para que no les tengan miedo los demás -dije corriendo a la puerta y cuando me vi en el espejo retrocedí un poco para verme nuevamente- Y-yo... soy un fenómeno -era un monstruo. No lo podía creer.

Stan: Bianca, está bien. No eres un fenómeno -dijo acercándose a mi.

Bianca: No me toques -dije retrocediendo- No los quiero lastimar -dije corriendo escaleras abajo.

Salí por la puerta y corrí hasta encontrarme frente el bosque. Noté que mi abuelo y Dipper me perseguían así que empecé a correr mientras lloraba.

SOY UN MOUNSTRO... UN FENOMENO... UNA BRUJA... Pensaba y cuando dije lo último hice estallar un trueno contra el suelo.

Corría y corría hasta que empezó a llover y quedé empapada. Seguí caminando mientras me apoyaba en los árboles y lloraba a todo pulmón.

Bianca: ¡Noooo! -grité fuertemente al cielo- ¡¿Porqué a mi?! -gritaba llorando.

Seguí caminando mientras sentía cómo las gotas caían fuertemente del cielo.

No puedo regresar con el abuelo y Dipper. Si lo hago todos nos verán mal. Pensaba mientras seguía llorando.

Seguía caminando y al darme cuenta estaba afuera de la casa de Bill. Iba a correr para tocar la puerta y estar entre sus brazos mientras él me consolaba pero después volví a ver mis manos y seguí por otro camino.

Bianca: Adiós, Bill -dije alejándome de ahí.


No podía más, ya habían pasado más de 2 horas y cuando me dí cuenta encontré un lago. Como estaba tremenda mente cansada me senté enfrente de él y no podía dejar de ver mi reflejo. Mi muy largo cabello castaño ahora era color morado y mi suave piel aperada ahora era lila.
Cuando me di cuenta de ahora tendría que ser más ágil y estar más preparada para correr y escapar. Aparecí unas tijeras en mi mano y me corté el cabello hasta los hombros. Después aparecí ropa más cómoda y seca. Era una blusa morada un poco holgada y unos shorts negros junto a los converse negros que hacía ya tiempo no me ponía.
Chasqué los dedos y convertí ese oscuro y opaco lago a un hermoso lugar. No creía lo que veía, pero creía ya haber encontrado un lugar donde entrenar.
Después de ese día, visitaba a Dipper y a Bill por las noches mientras dormían. Y aunque ellos no lo sabían siempre estaba ahí, viendo y contemplando lo que hacían para asegurarme que no necesitaran nada.

¿Qué paso conmigo? ¿Continua la historia? ¿Qué hay de Dipper, Mabel y Bill? ¿Los volveré a ver?

Continuará...


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