Universidad de los reyes

16 0 0
                                    

Camino despacio con las manos en los bolsillos, subo el cierre de mi casaca hasta el cuello, ahora en Lima hace tanto frío que la gente prefiere quedarse en casa. Solo veo a los comerciantes abriendo sus puestos, algo tienen que hacer, algo tengo que hacer.

Miro el reloj; las doce y media, apresuro el paso para no llegar tarde, las personas me miran correr y en sus mentes solo piensan en una cosa: qué habrá robado ese chibolo. Ahora no se puede correr sin que te miren mal a menos que tengas tu ropa sport y vivas en miraflores, vivimos con temor, eso ya se ha echo costumbre aquí, nos miramos entre limeños con miedo y con eso también se pierde la idea de que si alguien se acerca a ti es porque quiere ayudar. 

Llego a la universidad, voy al comedor y veo la larga cola que hay para poder almorzar, pienso: ahora sí estoy fregado. Escucho que alguien me llama, Es Sebastián.

- ¿Está larga, no ? la gente cada vez se hace más pobre y nosotros la pagamos haciendo colas más largas- dice Sebastián.

-Déjalos ser pobres, mientras no pidan dinero con la excusa de serlo todo bien para mí-le digo-.

-Si tú no tuvieras dinero estarías pidiéndolo a gritos -dice Sebastián mirándome esperando mi reacción-.

No, si yo fuera pobre buscaría al maldito rector y le robaría su dinero.

- Bien compa, ya te estás pareciendo a Visvaldo-me mira sonriente con sus ojos saltones esperando que me sintiera alagado por lo que dijo-.

- Falta que me paguen treinta mil al mes para ser como él, pero por mientras me conformo con ser yo. Te veo luego que tengo que comer-le respondo-.

Sebastián viene de la clase obrera, su padre es un minero y su madre trabaja en casa, claro, si su esposo no fuera un cerdo machista trabajaría en el banco como lo hacía antes, conozco a Sebastián desde niño, íbamos a la misma iglesia y a veces solíamos ir donde las niñas que asistían a quitarles esa santidad que ganaban por ir a misa. el tiempo pasa tan rápido que puedes vivir de los recuerdos o hacer unos nuevos.

Entro a la cafetería y voy a la mesa del fondo. Ahí están Eduardo, Sofía y Jair.

- ¿Es cierto que le fuiste infiel a Cynthia con Angela? - me dice Sofía.

- Mucho gusto en saludarte también- le digo-.

- No me vengas con tus bromas ahora, ¿alguna vez piensas no arruinar cada relación que tienes?- se nota molesta, me mira fijamente, creo que esta vez sí hice que se amargara-.

- Mira, no es mi problema que sea tu amiga y no le hubiera sido infiel si no hubiera estado de sangrona esos días, necesitaba desahogarme y Angela me invitó a su casa, vimos una película, después fuimos al cuarto de sus padres y comenzamos a chapar, luego me la tiré tres o cuatro veces, esa chica sí que sabe como dar un buen sexo.

Fue un 10 de Diciembre, lo recuerdo porque ese día era el cumpleaños de mi hermana. Me había peleado con Cynthia unos días antes, siempre peleábamos, no entendía ni siquiera el por qué seguíamos juntos, Angela y yo eramos amigos desde que por accidente la empujé por las escaleras, apenas cayó bajé corriendo para ver cómo estaba, ella solo reía, esa sonrisa que quiere todo hombre en una mujer, sus dientes parejos y blancos y esos ojos marrones que la hacían ver más hermosa todavía, ella estudiaba odontología que estaba a pocos metros de mi facultad por lo que siempre la iba recoger para irnos a pasear un rato. Cuando le conté sobre mi pelea con Cynthia empezamos a actuar distinto, cuando caminábamos deslizaba su mano desde mi pecho hasta mi estomago y yo iba desde su estomago y con mi dedo índice subía entre sus pechos hasta llegar al cuello, ahí la agarraba y la miraba a los ojos. Nos tentábamos siempre, cada uno era libre de tocar lo que quiera, cada uno tenía un objeto sexual con que divertirse, y así fue hasta que uno de esos días su mano no solo llegó a mi estomago sino continuó bajando,supe lo que ella quería, supe lo que yo quería, agarré sus pechos y los apreté con mis dos manos, soltó un gemido casi silencioso pero lleno de placer, nos miramos fijamente, la besé mientras bajaba lentamente mis manos hasta su culo, ella apretaba con más fuerza, le mordí el labio, después, ella mordió el mío, cada vez más fuerte. Me dijo que su casa estaba cerca y que no había nadie, acepté, en el camino a su casa no dejábamos de besarnos con más placer cada vez, el deseo de lo prohibido crea una una ilusión de perfección, no debes de pensar, solo actuar.

Abrió la puerta mientras yo estaba tocándola por detrás, eso hizo que se demore más, entramos, fuimos a la habitación con la cama más grande, la de sus padres, la tiré en el colchón mientras me quitaba el polo, pensé en Cynthia, me detuve, le dije que estaba mal, que no quería hacerle daño, se puso triste, pero en sus ojos solo mostraba molestia, me dijo que no importaba pero que al menos me quedara un rato más, acepté de nuevo, fuimos a su escritorio, era inmenso, tenía muchos libros pero todos estaban con polvo, no tenía interés por la lectura, tampoco yo lo tenía así que me valió una mierda lo de los libros, una gran pantalla de computadora estaba a un costado, nos sentamos y empezamos a jugar pacman, no sé por qué escogió ese juego hasta ahora, quizá sabía lo mucho que me encantaba jugar pacman, después de mis clases me tomaba un descanso para ir a una cabina y jugar ese juego que tan enviciado me tenía, después me preguntó si quería ver videos, le dije que sí , me volvió a tocar, no la detuve, vimos dos videos de personas teniendo sexo a todo volumen mientras nos tocábamos, la volví a besar, la tentación regresó, se sentó encima de mi pierna derecha, luego se volteó dándole la espalda a la computadora, no me opuse,empezamos a chapar, tocaba sus pechos, esos pechos chicos pero bien esculpidos, quizá no tenía el mejor cuerpo ni la mejor cara que se ha visto en Lima pero si que sabía como tentar a cualquier chico con el que quisiera acostarse, fuimos de nuevo a su cuarto, la tiré, me quité el polo y me puse en cima de ella, le quité el polo y el sostén, luego su short y su calzón, la cama rechinaba y se movía con fuerza, ella gritaba de placer, lo hicimos de todas las formas y maneras que se nos ocurrieron, cada que nos mirábamos reíamos y lo hacíamos con más fuerza, parábamos unos minutos para contemplar nuestros cuerpos desnudos, uno sobre el otro, explorando lo desconocido, sintiéndonos vivos(en las dos formas que vivo significa para mi) y lo volvíamos a hacer. después de 3 horas me fui de la casa.

-Ya déjalo, lo hecho echo está, pero eso sí, deberías decírselo a Cynthia- dice Jair con temor a lo que fuera a responder-.

-Si tú no le dices yo se lo diré, Cynthia es la mejor chica que he conocido, no entiendo por qué mierda te fuiste con esa puta-dice enfurecido Eduardo-.

Él siempre ha estado enamorado de Cynthia, desde que se conocieron en el colegio, se moría de celos siempre que me veía con ella, lo bueno para mí, es que nunca se lo dijo a ella.

- Está bien, se lo diré, ya dejen de joderme- dije molesto.

No los entiendo, no hay que ser monógamos en una relación de colegio o universidad, siempre acaba, ¿por qué desaprovechar la oportunidad de acostarte con alguien solo por tener una pareja quien después no verás jamás? no entiendo el amor, dicen que es el mejor sentimiento de todos, que los que encuentran a su media naranja vivirán juntos por siempre, todo eso es una mierda, no necesito de otra persona para que complete mi vida y me importa un carajo que los demás me vean como alguien que no soy, soy una puta persona como ustedes, ocúpense de sus asuntos y no en los míos. Me siento molesto, ¿por qué les importa lo que haga? no digo palabra alguna pero en mi mente sí, en mi mente siempre pienso, siempre me libero, cierro mis ojos y lo recuerdo; cada palabra, cada roce, cada beso, no me arrepiento de mis acciones, no creo en ningún Dios, no creo en el cielo ni en el infierno, además los "hipster"(esos que andan con su polito de un gato usando anteojos, sus lentesitos Ray-ban,un sombrero de los 50's simbolizando los "cultos" y "clásicos" que son y sus zapatos "extranjeros" (comprados en polvos) para simular europeidad creyéndose importantes) andan diciendo que la tierra es el verdadero infierno y si eso es cierto nos están dando la total libertad de hacer lo que queramos, podemos matar, robar, suicidarnos, violar, después de todo si este es le infierno no tendremos un castigo al morir, así que a disfrutar bien la vida.

Voy a la facultad de arquitectura, pienso que es lo que le diré cuando la vea, me pongo nervioso: mierda Lorenzo no actúes como un maricón, dile lo que pasó y si te perdona bien sino fácil te buscas otra costilla. Sale del salón.

- Hola amor, que haces por aquí? oh como me agarras desprevenida-me dice cynthia, siempre alegre ella, sonriendo hasta en el peor momento.

-Hola cyn, tenemos que hablar.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 30, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La calle y sus enredosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora