Viajando por el mundo

El día definitivo

Me había despertado con un simple plan: Irme de casa y emprender un viaje por todo el mundo. ¿Por que?: SIMPLE.
Mis padres se han quedado atrancados en el pasado y siguen pensando que soy una niña pequeña que no puede hacer nada sola y que no sería capaz ni de matar una mosca. Pero ellos están equivocados, MUY equivocados. Por eso quiero comenzar un viaje en el que experimente nuevas cosas y descubrir las maravillas que me estan esperando en este mundo. Después de hacer el viaje la verdad no se que voy ha hacer ni dónde voy a ir, pero de momento quiero centrarme en el presente.

Me desperté a las 5 de la madrugada. No quería despertarlos. A parte tampoco quería que se enterasen. Por eso les deje una nota en su habitación que decía lo siguiente:

Mamá, he decidido irme por mi propia cuenta para cambiar mi rutina diaria y para demostrarme a mi, a ti y a papá, de lo que soy capaz. Por favor no me busquéis, estaré bien. He cogido el dinero que gané en el trabajo que me dio la tía Iris en aquella heladería.
Os quiero.

Paula.

Preparé mi mochila de viajes, que utilizaba las pocas veces que iba de viaje. Y la llené de todas las cosas que necesitaría en este viaje. MUCHA agua, comida, algunos refrescos...A parte de toda la documentación como el pasaporte, el DNI...También algunas prendas para vestir, pero eso no me preocupaba mucho por que ya me compraría más en...Algún sitio. También me puse mi cámara de fotos, nunca salgo sin ella. Adoro la fotografía y me encantaría en un futuro desicarme a ella.

Salí de mi casa rumbo a el aeropuerto. Mi primer viaje era rumbo a Roma, Italia. No se hablar Italiano pero se parece bastante al Español así que de eso no me tengo que preocupar.
En realidad no tengo idea de lo que me espera pero algo si se: Que me va a canbiar la vida por completo.