Un cambio

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Hola, mi nombre es Jason Bane, tengo quince años y vivo en Colombia, pero por cuestiones económicas y el hecho de que mi padre nos dejo abandonados y mi madre no era originaria de este país, vivía aquí solo por mi padre que se la había traído del extranjero.

Yo no opuse resistencia a la decisión de mi padre, pues él y yo nunca nos llevamos bien. Para ese instante, yo ya no tenía amigos, estaba completamente solo. Mi madre tomo una decisión y era que iríamos a su país natal, esto sería un nuevo comienzo para mí, lejos de todas las personas que me habían hecho algún daño.

Al país que debíamos mudarnos era Nicaragua, yo no conocía este lugar, mi madre me había llevado un par de veces pero para ese entonces yo tenía unos cinco años de edad por lo tanto no recordaba la gran cosa, apenas recordaba que su capital era Managua y porque ahí vivían mis abuelos materno. Mi madre siempre ne había dicho, que este país era pequeño pero muy hermoso, con grandes maravillas naturales, lagos, lagunas, volcanes y cosas de esa categoría. A mí la verdad no me interesaba nada de eso, tan solo me quería ir de mi país y alejarme de todos, ara empezar una nueva vida, quizás mas feliz y productiva.

Mi madre me dijo que nos iríamos en una semana y que arreglara todos mi asuntos pendientes. No entendí a que se refería con eso ultimo, pero hice caso omiso, mi plan para los siete días era encerrarme en mi cuarenta y salir solo para comer, lo que hice el primer día, pero me di cuenta, que era mi última semana en Colombia y podía irme sin dejar mi huella, en todas aquellas personas que me habían hecho daño, aclaro no es que sea vengativo ni nada de eso, pero ellos vaya que se lo merecían. Yo les había aguantado todas esas cosas sin decir nada, pero ya era hora de desquitarme un poco, y hacerles pagar por cada una de sus maldades en mi contra.- Esto se pondrá bueno- dije en mis adentros.

Era miércoles por la mañana, ya solo tenía seis días para ejecutar mi plan, empecé por ver mi plan y arreglar los últimos detalles de este, decidí no hacer nada precisamente cruel, pero si haría que se arrepentirán de todo lo que me habían hecho. Cuando todo quedo perfectamente calculado decidí que la labor empezaría el viernes y así podría descansar el jueves -Eres un perezoso- dijo mi conciencia-Ya cállate- le conteste. Pase el jueves muy tranquilo haciendo mi plan original, lo disfrute mucho.

Llegó el día en que todo terminaría lo primero que hice fue ir donde "Mi mejor amigo", a él lo conocía desde el jardín de niños, pero resulto que solo estaba conmigo por interés educativo y no me refiero a que quería mi instrucción o mi ayuda, si no a que él quería que yo siempre le hiciera los trabajos. Un día me negué a hacer todo el trabajo y él se separo de mí y luego divulgo un rumor de que yo era homosexual, y no es que me ofendiera eso, pero me molestaba andar en boca de todos. El viernes por la mañana fui a su casa y como era amigos de su madre entre sin mucho esfuerzo, las clases ya habían terminado, pero el tenía que reparar dos clases, así que entre con el pretexto que le ayudaría a estudiar, subí a su habitación muy tranquilo él estaba justo como me lo había imaginado, acostado viendo televisión, sin preocuparse por nada entonces respire profundo y lo vi directamente a los ojos

-Hola,¿Que tal?- le dije en un tono tranquilo pero con una mirada fulminante

-Hola todo bien- me contesto en un tono de asombro, supongo que yo era la ultima persona a la que esperaba ver en su casa.

-¿Que haces aquí?- dijo con una mirada de molestia y disgusto, yo en ese momento solo respire y aclare mi mente.

-Vine para decirte que eres un estúpido, un bueno para nada, un parásito de la sociedad, que lo único que sabe hacer es aprovecharse de la bueno voluntad de las personas, eres un idiota mal agradecido y por favor¿Como pudiste inventar que yo era gay?, eres un insecto y sabes que, gracias le doy a Dios, de que ya no seamos amigos- Después de desahogarme me aleje sin dejar que me contestara, sentí como su mirada atravesaba mi cráneo como si fuera un rayo láser , pero no le dí importancia alguna, me despedí de su madre y me fui de esa casa. Ya había cumplido la primea cosa de mi lista de pendientes por resolver antes de dejar Colombia, ya solo me quedaban dos pendientes mas los cuales los realizaría los dos días siguientes. Pero no estaba muy preocupado por ellos , tan solo quería alejarme y disfrutar de la paz que inundaba mí ser.

Me enamoré de ella?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora