Saint Seiya Cruzadas: Los Años De Gloria.

Capitulo 8.

"años, siglos y milenios transcurridos desde aquella vez en que decidiste mirarla a ella y no a mi, por que me abandonaste, por que me negaste tu corazón?"

En el recibidor de la mansión Kido las cinco guerreras y los caballeros se miraban sin pronunciar palabra, creando un silencio abrumador y pesado ,silencio que Saori sintió demasiado incomodo y largo ,se acerco a las guerreras y las saludo amablemente notando que nadie lo haría

-hola chicas , Delian es un gusto tenerlas aquí-dijo la peli lila con una hermosa sonrisa en su rostro

-para mi es un gusto mayor, Saori esperaba con ansias el que ustedes y nosotras nos encontráramos ,mira te he traído este presente- la azabache tomo la caja de las manos de su adorada hermanita y se la diosa a la diosa que algo sorprendida lo tomo gentilmente

- no tenias que molestarte, no era necesario Delian

-es un pastel de zarzamoras con crema -dijo Isabela muy sonriente y buscando simuladamente a su padre entre los caballeros dorados - esperamos que les guste

-oh que delicia, muchas gracias, que tal si lo tomamos en el balcón con un poco de te? - sugirió la diosa entregando el pastel a Tatsumi para que lo sirviera -la terraza de ahí da perfecto al jardín que últimamente esta muy bien cuidado gracias a su padre

-eso seria maravilloso, entonces vamos -todos los presentes se dirigieron al balcón que daba justo al jardín que mas que flores tenia unas hermosas rosas rojas significado inequívoco de que Afrodita tomo las riendas del lugar

Ya que todos se habían sentado y tenían su pastel una taza de te enfrente de ellos servidos por las expertas manos de Tatsumi, Saori prefirió dar inicio a la tan esperada "platica"

-Delian quisiera que nos hablaras sobre la guerra, me apena pedirlo de esta manera pero la verdad es que entre mas rápido sepamos de que se trata mas rápida será nuestra respuesta ante esta, así que me gustaría que empezaras a contarnos con detalle-la diosa miraba seria y amable a la vez ,tenia esperanzas de que pudiera hacer algo inmediato para detener la guerra o en su defecto para atrasarla

-pues bien ya que estamos reunidos la mayoría, tienes razón, lo mejor seria que habláramos de esto de una vez por todas, o si no el tiempo nos comerá y ya no habrá vuelta a atrás- la dragona saboreaba delicadamente su rebanada de pastel con sus hermanas a cada lado, mirando a la diosa a los ojos y recordando cada uno de los sucesos acontecidos empezó su relato-Todo tiene comienzo después de que Apolo te bloqueara tus recuerdos ,a ti y a tus caballeros ,el y su hermana se hicieron al control del Olimpo en poco tiempo

-pero y mi padre?... por que no los detuvo?-pregunto la diosa interrumpiendo a la azabache

-tu padre no se encuentra en el Olimpo desde hace casi cien años -contesto esta sorprendida por la pregunta de la diosa -acaso tu no lo sabias?

-la diosa Athena no había podado comunicarse con su padre o con el resto de sus hermanos de manera civilizada-explico el patriarca Shion

- o de alguna otra manera que no fuera una guerra- agrego Dokho

-entiendo, había escuchado de tu hermano Ares que tu no creciste en el santuario, es eso cierto?- pregunto tomando un sorbo de su te

-es algo difícil de explicar pero por favor sigue hablando- la diosa prefería no entrar en detalles como esos por ahora después ya habría tiempo, aunque si se sorprendió de que Ares le haya dicho eso a dragona-si mi padre no se encuentra en el Olimpo aun así debía haber hecho algo no?

-no necesariamente, una cosa es que pueda y otra cosa que quiera, si pudiera haber hecho algo créeme lo hubiera hecho, pero como podría al no estar en el Olimpo ,aunque tienes razón pudo y debió haber hecho algo -la guerrera pensó para sus adentros ,la diosa tenia razón ,por que rayos Zeus no movió ni un dedo?...eso seria algo para preguntarle después-como decía ,tus hermanos se hicieron del Olimpo muy rápidamente, y aunque a Ares no le cayo en gracia eso ,tubo que aceptar que al ganarte a ti, la tierra ya no era tan difícil de tomar, los dioses entonces comenzaron a hacer su voluntad ante los humanos y de sirvientes y plagas no los bajaban