Capítulo 10

156 13 4
                                    

Me sobresalto en mi cama al escuchar un fuerte ruido proveniente de la cocina, algo así como todas las ollas cayéndose todas juntas. Alarmada, acostumbrada a que la mayoría de los ruidos así sean de caminantes, me levanto rápidamente de mi cama y me dirijo hacia la cocina con la pistola en la mano.

Bajo a un paso rápido las escaleras, y lo que veo me deja más desconcertada de lo que ya estaba; Carol con una mano en el corazón pálida, y Glenn tirado en el suelo con todas las ollas alrededor mientras se ríe a carcajadas.

Carol me mira y me da una sonrisa pequeña, como agradeciendo que haya llegado en ese momento.

─ ¿Te hemos despertado, Astrid? ─Me pregunta con un tono de voz maternal, ese tono que nunca escuché de la boca de mi, ahora muerta, madre.

─ Sí, pero no importa. Es muy tarde ya, tendría que haberme levantado hace ya un rato.

─Si quieres, puedes acostarte un rato más, yo me quedaré recogiendo todo estoy y limpiando lo de anoche en lo que Glenn se termina de reír de lo que ha causado ─Contesta mientras mira a Glenn entrecerrando los ojos.

─ No, tranquila, ya no tengo sueño, estoy acostumbrada a levantarme a esta hora, que Glenn si quiere que se vaya y yo te ayudo en lo que pueda en lo que los demás se levantan.

─ ¿Me estás echando, Astrid? ─Pregunta Glenn con cierto tono de indignación fingido, como esperando que yo le dijera que no, pero claro, soy yo.

─ Sí, Glenn, sí te estoy echando. Vete y échale de comer a los cerdos, no haces nada aquí molestando.

Glenn hace una mueca de asco.

─ Prefiero pasar de eso, esa es tarea de Rick, no mía.

Y con eso, se va mientras yo observo cómo desaparece de la cocina y escucho una pequeña risa de Carol. La miro con una sonrisa sellada y me agacho para empezar a recoger los trastos que seguramente Glenn habrá tirado.

─ En realidad eres buena niña, Astrid.

─ Eh... gracias.

No sé a qué ha venido eso, pero vamos a dejarlo pasar. Querrá sacar conversación y yo no soy buena con eso.

Al parecer nota mi incomodidad y decide ponerse a fregar los platos con un cubo de agua y un trapo. Cuando recojo todo lo que Glenn ha liado, lo coloco en la encimera y busco por los rincones de la cocina una escoba que trajeron un día de expedición. Me dispongo a barrer empezando por la puerta, pero entonces Carol quiere entablar una conversación conmigo. Oh, no... aquí viene.

─ ¿Sabes? No entiendo por qué Carl y tú os lleváis tan mal. Sois de la misma edad más o menos, quizás él es unos meses mayor que tú, podríais llevaros bien y ser amigos, y a lo mejor hasta terminaríais juntos. Quién sabe.

─ Eh... no lo veo yo posible. No me suelo llevar bien con las personas como él.

─ ¿Y cómo es él, según tú?

─ No lo sé, tiene pinta de ser egocéntrico. Parece que no le importa nadie, que sólo se preocupa por él mismo, cree que por haber llegado la última puede tratarme como él quiera, y no, no es así, al menos no conmigo. Si quiere guerra, va a tener guerra. Además, él me dijo que me devolvería la broma, pues aquí estoy esperando. ¿Cuánto ha pasado desde que me lo dijo? ¿Una, dos semanas? Sigo esperando. ¿Y qué hace? Nada.

─ No seas tan dura con él, Astrid. No ha pasado buenos momentos. Este mundo de ahora cambia mucho a muchas personas. Él es una de ellas. Su situación no ha sido buena.

─ Pues explícame qué es lo que tanto le atormenta para que sea así, y puede que al final le entienda. Mientras que no sepa de él, no podré entenderlo ni ser paciente con él, sólo digo que aunque le llegue a entender, no tiene derecho a tratarme así.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 25, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

We Can Survive ~Carl Grimes~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora