Todo Por Ella (Raura Perver)

Hablar sin palabras

Narra Ross:

Estábamos ya en mi auto de camino a casa.

- Mm Ross, sabes que este no es el camino a mi casa, ¿cierto? - me dijo Laura, yo reí.

- Lo sé, dejaremos a mi hermana y a Ratliff en mi casa, tu y yo tenemos otro destino - dije tomando la mano de Laura, para luego besarla.

- Aww Ross, que tierno - dijo Rydel, yo la miré desde el espejo retrovisor - Pero que cerdo también.

- ¿En serio, quieres que retomemos la otra conversación? - le pregunté a Rydel escuchando la leve risa de Laura.

- Mm, mejor no - me dijo, me estacioné frente a mi casa - Hey Lau, ¿quieres entrar un rato?

- No creo que... - dije pero ella me interrumpió.

- Claro, pero será solo un minuto - dijo sonriendo - Cierta persona puede desesperarse

- Pues cierta persona cuando termine el minuto te sacará de esa casa - dije guiñando el ojo hacia ella.

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- Fue agradable estar con tu familia - dijo Laura en el auto

- No si te avergüenzan todo el tiempo - dije con el ceño fruncido

- ¡Claro que si! Además, lo que dicen son cosas que no me dirias - dijo ella

- Es cierto - dije riendo un poco

- Ross, esta va hacer la última vez que lo preguntaré, ¿A donde me llevas? - me dijo ella seria, tome su mano y la bes

- Quiero que pasemos tiempo de cálidad juntos - dije y pude ver como ella sonrió

- ¿Podemos pasar antes por una heladeria? - me preguntó inocente

-¡Por Dios Laura! ¡Acabamos de cenar! - exclame sonriendo

- ¿Y que tu quieres que yo haga? Tengo un hijo tuyo dentro de mi - me dijo ella sonriendo

- ¿Estas tratando de decirme algo? - dije levantando una ceja

- No, para nada, Señor como todo lo que quiero cuando quiero - dijo

- Es por palabras como esas que no comerás helado - dijo en broma

- Ross - gruñó ella - No saciar los antojos de una mujer embarazada provoca que los bebes tengan alguna que otra mancha en el cuerpo - dijo y yo la mire - No quiero eso para mi hijo - Yo asentí

- Nuestro hijo - la corregí, ella asintio

- Nuestro hijo, ¿Aunque, sabes algo? No me importaria para nada que el o ella naciera con el lunar que tienes en... - dijo pero la interrumpi

- ¡Laura Marie Marano! ¿Desde cuando es usted una persona tan perversa? - dije sin ocultar mi sonrisa

- Desde que he recorrido su cuerpo con mi boc... - la volví a interrumpir

- ¡Señorita Marano! Hay un bebe presente - dije y ambos reímos

- Esta bien, esta bien - dijo en modo de rendición

- Aunque por otro lado, desearia que el o ella tuviera tu... -dije pero ella me interrumpió

- ¡HELADERIA! - gritó cuando vio el establecimiento, negando con la cabeza me estacioné ahí

- Heladeria, justo lo que iba a decir - dije mas para mi mismo, entrmos a la Heladeria, nos dirigimos hacia el cajero.

- Buenas noches, ¿Que desean? - dijo el cajero de unos 24 años