Especial I

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Ya era la hora de dormir pero por alguna razón no conseguía dormirme....¡ah! claro el hecho de que tengo a un niño de 4 años saltando sobre mi cama como si estuviera en Disney, todo porque sus padres se habían ido a no se que parte y no podía negarle la ayuda a Angel

-Cuentame un cuento- me suplico mirándome con carita de perrito abandonado bajo la lluvia

Me pregunto que clase de consecuencias apocalípticas se presentarían si mi hermano Sebastian pide algo con esa cara...

-mmm, pero no encuentro ninguno de tus libros- de seguro Thomas se los llevo a la universidad para leerlos en su oficina (lo se porque el otro dia lo descubri llorando con pulgarcito)

-Pero quiero un cuento- sollozo mi pequeño desconsolado

¿Qué hago?

Encima el muy tarado de mi novio esta en el salón viendo una maratón de El rey león...y cuando ve la maratón del Rey león no hay quien lo aleje de la pantalla

-Bien, pero no llores te contare la historia de...Sebas...tina-

-¿Sebastina?- repitió mirándome asombrado

Pobrecito, de tio me tiene a mi que tengo cero imaginación para crear historias...¡Es tu culpa televisión!

-Sip, Sebastina era una...niña que...tenia asi...suegra enferma y su suegra se llamaba...¡Tomasina!-

-¿Tomasina? ¿De donde eran?- pregunto inquieto

-De un país muy muy lejano donde los nombres que aquí sonarian de travestis alla sonaban bien, ahora, como el marido de Sebastina estaba en...la guerra, el no podía ir a ver a su madre y Sebastina decidió llevarle una...caja con...alimentos y medicinas...-

#1 Sebastina y su peluca roja

Sebastina era una chica muy linda, era alta, delgada, de ojos claros y piel palida pero donde vivía, todos eran pelirrojos, como su cabello era rubio (es decir era hija del extranjero que alguna vez paso por ese pueblo) los demás aldeanos la discriminaban por ser DIFERENTE, un dia conoció a un joven...peluquero

-Hola, mi nombre es Angelo- se presento aquel apuesto y masculino joven

-Buenas tardes, mi nombre es Sebastina- se presento ella

Ese dia su madre la había mandado a cortarse el cabello pues ellas trabajaban cocinando y a Sebastina se le caia el cabello en al comida y para no ser reconocida Sebastina llevaba una capa que cubria su cabello, cuando se quito el atuendo, Angelo se sorprendió mucho al ver que era rubia, sintió pena por ella y decidió regalarle una peluca de cabello rojo

-Ahora nadie dira que eres diferente- dijo el joven sonriéndole

Sebastina estaba tan impresionada por el gesto de aquel apuesto hombre que se enamoro de inmediato de el

-No sabe lo agradecida que estoy por esto ¿Cómo podría pagárselo?- pregunto la chica sonriéndole

-Pues considerando la escasez que hay en este pueblo, podrías casa...-

-¿Casarte conmigo? Por supuesto que si- completo ella

-Yo iba a pedirte que cazaras algun conejo para mi pero supongo que casarnos no esta tan mal- se encogió de hombros el peluquero

Un mes después se casaron y vivieron felices hasta que a el lo llamaron para ir a la guerra

-No quiero que vayas- lloraba ella sin querer deshacer el abrazo que los unia

-Yo tampoco pero el rey me necesita-

-¡Pero es muy peligroso!-

-Alguien tieneque hacerlo...-

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