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29.

-¡Angelito!-

Me gire abruptamente, iba camino a mi clase de pintura cuando escuche a ...¿Leyna?

-Hola Leyna- sonreí contento

Pero ella tenia una expresión de preocupación que me extraño

-¿Cómo estas? Christian me conto ayer que estuviste en peligro...- me observaba fijamente, como intentando averiguar si yo me sentía bien

-Pues gracias a el y a Sebastian estoy bien-

-¡Que bueno! Me tenias muy preocupada, te vi en la fiesta pero cuando iba a saludarte te quedaste como pegado mirando a mi primo...lo lamento...-

La mire sin entender a que se refería

-¿De que hablas? Bueno, fue un malentendido pero ahora estamos muy bien- explique restándole importancia al asunto

-Si...bueno...-

Leyna comenzó a caminar hacia el ventanal, la segui acomodando la maleta de pinturas que llevaba en mis brazos

-¿Qué pasa Leyna? luces preocupada-

-Es que pensé que estarías mal por lo que viste- me sonrio mirándome con tristeza

-Ya te lo dije, Sebastian me lo explico, las preferencias de Sara son bastante claras-

Sus ojos se abrieron con sorpresa

-¿Preferencias? ¿A que te refieres?-

-Pues a que tiene novia- Vaya, al parecer Leyna no estaba muy enterada

-¿Novia? ¿Sara tiene novia?-

La mire confundido

-Si, se llama Ivana, es muy simpatica-

La expresión de Leyna se transformo en una de tristeza

-Angel, que yo sepa ellas son primas-

Alce mis cejas con desconcierto

-¿Primas? ¿Estas hablándome en serio?-

-Por supuesto, de hecho cuando pequeñas jugaban en la mansión con nosotros-

Nos quedamos en silencio, ¿Qué significaba eso?

"Yo que tu no hago conclusiones apresuradas"

-De todas formas, me alegra saber que ya estas bien, cuidate mucho- se alejo despidiéndose con un gesto de mano

Me quede parado en el pasillo

Quizas Leyna no estaba enterada de aquella relación, si, tenia que ser lo mas probable, considerando que una relación asi no seria bien vista por la sociedad...

.

.

-Te estaba esperando-

Mire sorprendido a Jack, ¿Qué hacia afuera de mi salón?

-¿Cómo dices?- gire mi rostro en busca de mi mejor amigo, pero misteriosamente había desaparecido

-Que te estaba esperando- había un asomo de sonrisa en su rostro

-¿Para que?- intente parecer tranquilo

-¿Quieres venir a mi casa a ver una película?-

Lo mire completamente sorprendido, ¿Me estaba hablando en serio?

Pero lucia bastante serio, no había atisbo de broma alguna en su mirada, mucho menos en su aura

-¿Estas hablándome en serio?- no pude evitar preguntarle