I'll never let you go |d.l|

Capitulo 13

—Tu madre me llamó unas 4 veces esta tarde —Le digo a Ed llevándome una cucharada de cereal a la boca

La gente normal desayuna cereal, yo la ceno

— ¿Si? ¿Y que decía? —Preguntó un quitarle la vista a su celular, según los movimientos de sus dedos parecía estar hablando con alguien

—Preguntarme unas cosas de la boda —Digo pesadamente

En ese instante Ed quita la mirada del aparato y me mira serio

—También me pidió que te dijera que le contestaras las llamadas —Desvío mi mirada al tazón de cereal

—Solo porque no le contesté una llamada esta tarde ya está exagerando —Bufó

—Es madre, su deber es exagerar —Dije con la boca llena de comida

—No hables con la boca llena —Dijo haciendo un gesto de desagrado

Yo lo mire por unos segundos

—No está llena, aun hay espacio mira —Dije mostrando el interior de mi boca

—Qué asco, no vuelvas a hacer eso nunca más —Dijo molesto

Idiota, Demi se rio de eso

Sin duda debo dejar de compararlo con Demi

—Como sea —Volví a lo mío, comer

—Iré a dormir —Se levantó

Se fue sin esperar respuesta de mi parte ¿He hecho algo mal? El no es así, hoy está actuando... raro

Mi teléfono suena en mi pantalón y lo saco, era un mensaje de Demi, sonrío leyéndolo

De: Demi

Buenas noches, espero que tengas los mejores sueños

¿Se puede ser más perfecta? ¿Es que al menos ella lo hace apropósito o le sale natural la perfección?

Para: Demi

Buenas noches para ti también Demz, dulces sueños

De: Demi

Te amo Cait

Para: Demi

Y yo a ti Demz

De: Demi

Por siempre

Para: Demi

Para siempre

Me levanté y me fui a la cama con la mejor de mis sonrisas, como siempre; provocada por ella

Vi a Ed dormir y otra vez ese sentimiento horroroso en mi, sé que no estoy haciendo nada bien, no quiero hacerle daño, el no se merece eso... no quiero hacerle daño a nadie. Me acerqué a Ed, se quedó dormido con su celular en su pecho, justo cuando lo tomé un mensaje le llegó vibrando en mis manos

De: Chelsea

Buenas noches para ti también Edie <3

(...)

Para: Demi

Le diré a Simón ahora

He llegado a una buena conclusión, no puedo hacer ni decir nada sin decirle a Simón primero, es mi mayor confidente

Mis manos sudan como obesa en gimnasio, no se supone que debería estar así de nerviosa, pero lo estoy. Con dificultad mis nudillos tocan la puerta, ya le había dicho que vendría y creo que esa fue la razón por la que abrió la puerta con rapidez. Yo le sonrío, o eso intento, el me sonríe y me da un rápido abrazo