Luego de subir aquella foto a Instagram y hablar por mensajes con Milly, me levanté y me digné a almorzar algo antes de que él llegara.
Mientras cocinaba sonó el timbre, los nervios recorrieron mi cuerpo y sin querer tire la cuchara de madera con la cual cocinaba. La levanté mientras maldecía y luego corrí a abrir la puerta. Le di un tirón y esta cedió dejando ver a aquel chico alto, morocho y dueño de mi corazón. Me extendió un ramo de flores, eran rosas blancas y rosas
- Son para vos – murmuró y asentí, tomando el ramo entre mis manos – em... ¿estas cocinando? – preguntó y asentí
- Si, ¿Querés comer? – ofrecí
- Sí, pero creó que se está quemando – abrí los ojos como plato y corría al cocina, no parecía tan mal, estaba comestible para mi
Él me ayudo a poner la mesa y luego de servir nos sentamos a comer y hablar
- Tengo que explicarte las cosas – dijo mirándome fijamente, parecía dolido y tenía ojeras, claramente no durmió nada
- No importa ahora, ya el daño esta echo, pero quiero saber porque no me lo dijiste – susurré sin mirarlo.
Obvio que me dolía, pero si algo era cierto, era que no podía estar sin él y sin importar cual haya sido su error yo iba a perdonarlo. Era su primer error y podía perdonarlo a cuesta de eso
- Solo tenía miedo de que me dejes, de todas formas todo se fue al carajo – explicó y bebió algo de jugo – no quería que me dejaras... pero cometí un error y quiero repararlo
- Bien – susurré, mire sus labios y no pude evitar pensar que otra chica los beso, que otra chica lo toco y simplemente quería gritar, pero debía guardármelo para mí
- Por favor dame otra oportunidad, te prometo que no voy a defraudarte, lo prometo – tomo mi mano entre las suya, ambas descansaban sobre la mesa, asentí torpemente sin mirarlo y pude ver de reojo su sonrisa, aquella que me encantaba, sonreí inconscientemente cuando sus labios tocaron mi mejilla
Kira llego a nosotros moviendo su cola Nash soltó una carcajada, la levantó en brazo mientras ella lengüeteaba su cara
- Dios esta enorme – sonrió
- No tenés idea de cuánto come por día – bufe y él se rio
- Seguro que si – sonrió y me miro
Mis mejillas se sonrojaron y no pude evitar agachar la vista a mi plato, quería que esto de verdad funcione, quería que de verdad esto salga bien esta vez y que podemos seguir adelante saltando la parte del "error"