Desperté por el sonido de la canción de alarma proveniente de mi celular.
Aun adormilada y con los ojos cerrados me levante, tenía la cabeza gacha cuando abrí los ojos, así que lo primero que vi fueron mis pies.
<<tengo un dedo gordo mas grande que el otro>> pensé mientras observaba mis dedos.Subí mis pies a la cama para poder examinarlos de cerca.
-¿Que rayos estas haciendo? -preguntó una voz de hombre que me resultaba familiar
Subí la cabeza para ver quien me hablaba. Nathaniel.
-Estaba examinando mis dedos -dije tranquila- ¿Tu crees que el gordo izquierdo es mas grande que el gordo derecho?
Alcé mis pies para que los viera.
-Tienes unos gordos hermosos -me giñó un ojo
-Gracias, oye...-comencé a recapacitar- ¿cómo entraste?
El río.
-A tu madre le agrado
-Ya, pero... Agh, da igual, shu shu, sal de aquí, necesito bañarme -lo saque a empujones de mi habitación y el dijo: "esperaré con tu madre"
Tomé una rápida ducha y me vestí con unos jeans blancos y una blusa negra con manga tres cuartos y unas 'vans'. Con mi cabellos hice una trenza de espiga que acomodé a un lado de mi cuello, calle do por mi hombro derecho.
Bajé a la sala de estar y ví a mi madre platicando con Nathaniel. Ella reía por un comentario que el había hecho. Necesitaba sacar a este hombre de aquí porque comienza a gustarle a mi madre y eso no es bueno.
-Hey, mamá, nosotros ya nos vamos, saluda a papá cuando llegue, yo vendré tarde.
Tome a Nath de una mano y lo jale sacándolo de mi casa, recibiendo quejas de su parte y de mi madre.
***
Ya una vez en su carro el prendió la radio y comenzó a escucharse por todo el vehículo la canción 'Wreacking Ball' de Miley Cirus.
-I came in like a wreacking ball -chillo Nath en un intento por cantar y empuñando su mano simulando tener un micrófono. Yo solo me reí
-Cantas precioso -Dije sarcástica, aun riendome
-Lo se
Su teléfono comenzó a vibrar interrumpiendo nuestra platica.
*Diga, ah hola, ¿para que?, de acuerdo iré* -Decía el al teléfono y después finalizó la llamada.-Oye, ¿me acompanarías a mi casa? Solo tengo que ir a llevarle algo a mi madre que me encargó. Dice que es urgente -dijo volteando lijeramente su cabeza a mi y finjiendo una sonrisa.
En realidad, prefería no ir, ya que quería que esto fuera rápido, pero, ¿que podía hacer?, es su madre.
-Claro.
Después de un recorrido escaso de aburrimiento gracias a los chistes estúpidos que hacía Nath -Por alguna razón, siempre me han causado gracias las cosas estúpidas- llegamos a una farmacia y Nath se bajó, el iba a comprar algo para su madre y yo a esperarlo en el auto.
Después como de unos 4 minutos, volvió.
Entro al auto, en el asiento del conductor y encendió el motor, me paso la pequeña bolsita negra con lo que había comprado en la farmacia para que se lo cuidara mientras el conducía. Encendió el motor y nos pusimos en marcha a su casa. Memoricé el camino en caso de que quisiera secuestrarme de nuevo.
Mi curiosidad me ganó y acabe abriendo levemente la pequeña bolsa para ver el contenido.
Miré un paquete dorado de cartón. Condones...
Mi piel se puso de gallina.
<<¿Y si me viola? Oh no..>>
-¿Esto es...? -pregunté yo pero me vi incapaz de terminar la pregunta
-Ja, si eres una mirona... Eso... Digamos que mi madre lleva una vida sexualmente MUY activa -dijo resaltando la palabra 'muy'. Yo no pude responder nada porque mi imaginación obsena se adueñó de mi.
***
Nathaniel aparcó el coche al frente de una casa color verde aqua muy bonita, con un bello h cuidado jardín, aun no se como a su madre le queda tiempo para foll...
<<Ya basta Eli>> pensé
Ni iba a bajarme del coche pero algo dentro de mi me lo pedía. Y no, no eran mis ganas de conocer su 'habitación', lo que muchos pensarían, ni a sus padres. Yo tenia ganas de ir urgentemente al baño.
Una vez dentro de su casa, su mamá nos recibió muy amablemente.
-Oh, hijo, has traído a una amiguita -dijó su madre cuando nos abrió la puerta subiendo y bajando sus cejas. Pervertida.
-Mamá, ella es Elisabeth, una amiga -dijo dirijiendose a ella para luego hablarme a mi- Eli, ella es mi madre: Sonia
-Mucho gusto, señora -dije yo mientras le estrechaba la mano a Sonia
-El gusto es mio, linda. Dime Sonia, de verdad me da mucho gusto verlos, Nathaniel nunca había traído a una chica a casa. Creí que era gay. -Lo ultimo lo dijo susurrando mas cerca de mi, en un fallido intento de que su hijo no escuchara.
Luego se movió de la puerta y nos invitó a pasar.
-Les prepararé algo para merendar, sientense -dijo Sonia, adentrándose en la cocina.
-En realidad mamá, Eli quiere pasar al baño y... Tenemos cosas que hacer.
<<Aleluya, no aguantare mucho con estos líquidos dentro de mi>> pensé.
-¡Boberias!, quedense un rato, solo quiero conocer un poco a tu "amiga" -dijo Sonia haciendo comillas en 'amiga'- Eli, cariño, pasa al baño, esta al fondo del pasillo, a la izquierda -me señaló el pasillo.
<<Wow, un baño que no esta 'al fondo, a la derecha', esta casa me gusta>>
Llegué al baño e hice mis necesidades. Cuando llegó la parte de usar el papel higiénico, lo busque y me encontré un rollo de cartón color marrón y una pequeña y débil hojita de papel colgando de el. Rebusque en todos los muebles del baño para llegar a la conclucion que nadie quiere saber: Se acabó el papel higienico. Y no estoy en mi casa.
Aturdida por el pánico pensé en que podía hacer. Si grito: Se acabó el papel. Quizá alguien me traiga. Pero, la verdad es que no quiero hacer eso. Hasta a mi me da pena. Así que saque mi celular y abrí Watsapp. Suerte de Nath me dio ayer su numero.
Para: Nathaniel
Yo: Oye...¿podrías...traerme papel? Ya no hay aquí.
Pulsé enviar.
A esperar la respuesta...O el papel.
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La chica de la fiesta
Novela JuvenilElisabeth Parks Mulkey vive con sus padres. Sus abuelos la quieren mucho. Tiene la mejor amiga que todas las chicas quisieran tener. Y es amante declarada de el chocolate. Eso hasta que Katherine Johnson Mulkey una desconocida chica (por ahora) la...