Comencé a buscarlo por todas partes mientras gritaba su nombre.
Subí las escaleras, y no había nada.
Comenzaron a escucharse o través las pisadas en el ático.
Subí rápidamente.
¡Para mi sorpresa! Noah estaba con la muñeca entre manos sentados encima del cajón.
—¿Como llegaste aquí?.—Le pregunte asustada.—Vamos.—Dije mientras lo cargaba.
Pasaron aproximadamente dos horas ya era de noche y mama no llegaba.
—No creo que mama llegue hoy.—dije decepcionada puesto era una noche lluviosa, caían rayos yo me abrace a Noah.
Al poco rato se durmió...
Lo lleve a su cuna y le cante una pequeña canción.
Regrese a mi cuarto.
La muñeca en la cama.
"Que extraño, creí haberla puesto en el librero."
—Voy a darme un baño.—dije para mi misma.
Me desvestí, y me puse la toalla.
camine al baño, tenia la sensación de que alguien me estaba siguiendo.
A lo cual no le preste mucha atención, me mire al espejo.
—Linda como siempre—Dije alabando mi belleza.
me quite la toalla, y entre a la ducha.
Corrí la cortina y abrí la llave.
Me aplique acondicionador y me enjuague, al abrir lo ojos me di cuenta de que había una sombra en atrás de la cortina.
Parecía ser la figura de una mujer, muy despeinada y con una bata.
Me quede tiesa por unos segundos.
Abrí la cortina y no había nada la cerré nuevamente, la sombra había desaparecido.
"¿Me estaré volviendo loca?" pensé asustada.
—Debo estar alucinando.
Cerré la llave, y salí de la ducha.
Comencé a cepillar mis dientes, Y me propuse a abrir la puerta.
al abrirla sentí que se empujo algo.
¡Era Lizzie! estaba detrás de la puerta.
"¿Quien coño la puso aquí?" Pensé asustada, me quede quieta unos momentos tratando de idear una buena explicación para lo que estaba pasando.
—Tal vez me la traje en la toalla y no me di cuenta.
No encontré mejor explicación.
Tome la muñeca y volví a mi habitación, me puse la pijama y me acosté.
No lograba conciliar el sueño, no tenia cortinas y la luz de los rayos no me dejaban dormir.
Pasaron algunas horas...Cuatro aproximadamente, Hasta que lograra dormirme.
Pero volví a despertar a causa de los truenos.
Sentí un bulto a mi lado, pase mi mano sobre este.
Sentí algo sedoso, de pronto un rayo ilumino toda la habitación...¡Era la muñeca!
di un brinco del susto dejándola caer al suelo.
De pronto escuche unos rechinidos que parecían venir del patio, Puse mis pies sobre el frió piso y camine hacia la ventana.
Efectivamente los ruidos provenían de afuera.
Me pareció ver un columpio moviéndose solo, frote mis ojos con mis manos y al abrirlos no solo estaba el columpio, tan bien estaba una mujer...

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Lizzie
HorrorElla esta aquí...Viene tras de mi. Viene tras de todos, Muy pronto el mundo se convertirá en tan solo Una pesadilla real. y creo...Que esta atrás de mi justo ahora.