JunjouRone-Shot

"Familia Usami Takahashi."

"Prologo."

-Usagi-san, ya basta.-Digo mirándolo con notable impaciencia.

Se remueve un poco entre las sabanas, pero aun así no me suelta.

Suelto un suspiro cansino, y sonrío mentalmente.

Tal vez, algunas cosas no han cambiado del todo.

Y es que, Han pasado años, desde que Usagi paso de ser mi tutor, a mi amante... Y de aquello, a mi esposo. Todos dicen que he cambiado con el paso de los años. Pero hay cosas que simplemente nunca van a cambiar.

Ni siquiera cuando ya has tenido cuatro hijos, y tres de ellos son adolescentes.

Si, hace un tiempo pude quedar embarazado. Si seguías un tratamiento con unas pastillas especiales, podrías crear un ovulo en tu cuerpo.

Al principio no era nada común, pero luego se volvió algo normal. Y no me arrepiento de nada, porque mis hijos son lo mas maravilloso que me ha pasado en toda la vida. Obviamente, sin descartar el haber conocido a Usagi-san...

El mas pequeño se llama Subaru. Tienes 7 años, y una mente muy ágil. Mas que todo, se parece a Usagi... con el cabello plateado, pero con los ojos cafés.

Luego le sigue Maya. Es una chica muy hermosa, y bastante alta. Incluso, mas que yo. Su ojos son verdes, y su cabello plateado. Tiene 16 años.

Misuki. Tiene 16, y según todos, es totalmente parecido a mi. Pero todo es una controversia, pues, lo único que tiene de heredado de mi, físicamente, es la altura. Su cabello es plateado, y su ojos violetas. Aun así, Akihiko nunca deja de pensar que el es su pequeño Misaki.

Kazuki. Tiene 17, y esta cursando su ultimo año de Secundaria. Su cabello es marrón, y sus ojos violetas. Su actitud es un enigma. Es decir, es la mezcla de la actitud de su padre, y de la mía. Por lo tanto a veces es extrovertido, como otras veces es una tumba.

Muchos años han pasado, y muchas cosas han cambiado...

Pero no me arrepiento de la vida que tengo ahora.

-Misaki-Su voz llega a mis oídos, y como si fuera una burbuja, mis pensamientos desaparecen con un "Poof".

-¿S-si Usagi-san?-Preguntó algo inseguro. A veces, simplemente no quería saber lo que quería, por miedo a que fuera algo extraño.

-Necesitó recargarme-

Ahí esta.

-¿¡Eh?!-Sus manos toman mis muñecas y no puede evitar sentir que una alarma resuena en mi subconsciente. Si, Usagi nunca cambiaría.-¡Los niños están en casa!-Digo forcejeando.

-No me importa.-Es lo que contesta.

Si, ese era el Akihiko de siempre.

Desinteresado, y con el libido bastante alto.

-¡E-espera! ¿¡Donde crees que estas metiendo tus manos?!-

-¿Cual es el problema? Si a Mama le gusta-Dice haciendo énfasis en la palabra "Mama" de una manera bastante indecorosa.

-¡Idiota, idiota, idiota! ¡Sueltame!-

Sus manos se cuelan por mi camiseta de pijama, y empieza a besar mi cuello de esa manera que me debilitaba.

-Esta mal que le hables así a tu marido, Misaki-Pronuncia de una manera tan grave cerca de mi oído, que simplemente empiezo a perder las fuerzas. Y el lo sabe. Lo sabe tan bien, que siempre usa su vos para hacer que mis fuerzas se pierdan.-Misaki, Te amo.-

No... Ahí va de nuevo.

Mi corazón late frenéticamente y llego a pensar una vez mas "No todo ha cambiado..."

-Ba-basta...-Había sonado tan lastimero que solo siguió con lo que estaba haciendo, para luego soltar una risa baja ante mi escasa voluntad.-¡N-no, ahí no!-Gemi. La camisa ya había desaparecido de mi cuerpo, Ahora el se hallaba besando y mordiendo mis pezones, instantáneamente haciéndome gemir.

Seguía siendo tan pervertido...

-Ahhh A-akihiko...-

-Me pone que me llames por mi nombre-Dice. Entonces empieza a bajarme el pantalón, y dejo de poner resistencia.

Con el tiempo, había aprendido que eso de todas maneras no me servía de nada.

-¿Que es lo que están haciendo?-Escucho aquellas vos característica de Maya y dejo de forcejear. ¿A caso estaba escuchando voces?

Una pisada estruendosa resuena contra el suelo, y enseguida volteo hacia la puerta.

Siento mi alma salir de mi cuerpo, y volverme papel.
Un muy, muy blanco papel.

Mis hijos... Mis hijos estaban allí observándonos con la puerta abierta, mientras Usagi me tocaba.

-¿Por que Papa puede besar a Mama, y yo no?-Pregunta con lágrimas en los ojos el pequeño Subaru-¡No es justo!-

-Porque el es mio.-Responde Usagi, ahora bastante amargado, mientras ve a nuestro hijo amenazante.

Una risa socarrona de parte de Kasuki que nos miraba fijamente me hizo tener un tick nervioso el en ojo.

-¿Sexo mañanero? Buena esa Pa.-

Veo a Misuki ponerse rojo de pies a cabeza, para luego salir de la habitación.

Entonces cuando creí que las cosas no podían empeorar... La puerta impacta aun mas contra la pared, y alguien mas hace presencia.

-¡Akihiko, Cuanto tiempo sin vernos!-Grita, arrojándose en la cama.

No puede ser...

-¿Isaka-san?-Preguntó aún consternado.

-Vete.-Dijo Usagi con toda una espesa nube negra a nuestro alrededor.

-¡Usami-sensei! ¿¡Donde esta el manuscrito?!-

¿Aikawa?

¿De donde había salido?

Suelto un suspiro y una gota de sudor bajo por mi frente.

-¡Larguense de mi habitación!-Grita Usagi con molestia.

Definitivamente, las cosas no habían cambiado mucho. Tampoco el echo de que esta noche seguramente el que saldría pagando todo, seria yo, mis hijos, y mi pobre, pobre trasero.

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¡He vuelto! Se que me extrañaron bastante, yo se que si.

Okno.

En fin, se preguntaran: ¿¡Que coño haces aquí?!

Pues verán, la respuesta es bastante sencilla.

R: Me ha regresado la inspiración.
Después de ver Junjou Romántica 3, mis llamas de Fujoshi se encendieron.

Pero en fin, les traigo una nueva idea que estoy ansiosa por desarrollar. Como ven, este one-shot es corto, y es porque NO ES UN ONE-SHOT. Va a ser una serie de unos cuantos capítulos que iré publicando aquí. Seria como un ¿Ten-shot? (Ten= 10 en inglés (?)

Estaba pensando en volverlo un fic, a parte, pero ñe. Lo publicare aquí, porque no sera algo seguido como tal. Sino one-shots de la "Familia Usami Takahashi"

Espero que hayan entendido, y muchas gracias a todos los que aun me apoyan. Son unas bellezas;)