cartas jamás leídas

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hace semanas que tenia el mismo sueño, y en todos aparecía aquel chico de cabello castaño y ojos color miel  vestía de una forma algo extraña, como las personas del siglo xix o xx, tenia entre unos 18 o 19 años.

En aquel sueño el chico llegaba a la que creo que era su casa y lo observaba sentarse en una pequeña mesa a escribir una carta de 2 hojas la mayoría,  meterlas en un sobre color blanco  y enredarlas con un listón, en cada sueño que e tenido jamás e podido ver que es lo que el escribe pero por su mirada tan profunda, llena de ternura pero algo triste supongo que es por amor ¿o puede que sea desamor? , después de ver como el chico guarda en un pequeño baúl las cartas el sueño se nubla y  despierto...

-¿En que estas pensando? - la voz de mi mama me saco de mis pensamientos y volteé a mirarla- nada en especial- dije llevándome una de las cajas a la camioneta.

-si no fuera algo importante o especial no estarías tan distraída, bueno vamos hay que apurarnos si no vamos a llegar tarde -ok mama - asentí cargando otra caja y llevándomela a la cajuela.

Hace mucho me hubiera gustado no abandonar la ciudad en donde había pasado los mejores años de mi vida, pero después de lo que paso en la graduación, supongo  que esta bien cambiar de aires, de amistades  y comenzar de cero, después de todo no esta tan mal la nueva ciudad en la que viviremos mi mama y yo, es una casa grande, con un jardín enorme, muchos arboles y la mejor parte mi recamara, bueno me estoy dando ideas de como decorarla y pintarla. Lo único malo de esto es que mi papa no podrá venir este año con nosotras, el se quedara por un tiempo aquí mientras termina sus exposiciones,trabajos y excavaciones, además le queda mas cerca aquí su trabajo, mientras que a mi mama y a mi nos quedan mas cerca el trabajo y la universidad en la otra cuidad en donde viviremos.

Aun después de 18 años no logro entender como es que mi madre y mi papa se conocieron, bueno me resulta algo curioso por que mi papa con su trabajo de Arqueólogo no esta estable en un solo lugar tiene que andar de aquí para haya en diferentes lugares y se fueron a conocer en un museo de Arqueología, a mi mama no le gusta mucho esas cosas pero podría decir que gracias a mi tía que es como amante de la cultura, museos y cosas así, la llevara ese día a rastras a mi mama, una nueva historia de amor nació en el mundo (bueno una de tantas historias de amor) que pequeño es el mundo, en fin después de un año de salir y ser novios se casaron y aunque a veces casi no se ven por el trabajo y esas cosas pero puedo asegurar que el amor que se tienen es muy grande aun, lo se por que lo veo en sus ojos.

-Por fin hemos llegado, ¿acaso no es hermosa?- me pregunto mi mama señalando hacia la casa, la cual al verla me quede impresionada pues era mas grande de lo que me imagine.

-es mas que hermosa, ¿enserio vamos a vivir aquí?- pregunte para ver si esto no era otro de mis extraños y locos sueños...

cartas de un corazón rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora