Capítulo 4

38 1 6
                                    

*Casa de Emilia*

-Maa!! YA VOVLI- gritó abriendo la puerta pegándole a su hermano menor en la frente- Já...MA NO ME DIJISTE QUE EL PENDEJO ESTABA ACA!

-pff..andate a la mierda- dijo en voz baja mientras se tocaba la frente

Ella fingió no escucharlo para no originar pelea, dejo su mochila en el piso y se dirigió directamente a su cuarto

Ya recostada en la cama, se puso a pensar sobre lo que habia pasado esa tarde en casa de su amiga

-Que les pasa a esos dos? Federico se porto algo raro je, no estará celoso?? Nah..no creo, es muy posesivo con sus amigos, si se tratara de mi hubiera hecho lo mismo, no?- se frotó un ojo bostezando- Necesito hablar con miri para aclarar esto. Seguro ella no se dio cuenta que, por fuera los dos parecian llevarse bien, pero por dentro se deseaban todos los males

Y la llamó. Pensando que le hiba a decir, como hiba a encabezar el tema. Se sorprenderia? Le molestaria?
Todos esos pensamientos fueron interrumpidos por un bip, que marcaba que se iniciaba la llamada, otro bip...sin respuesta. La atendio la contestadora, que reproducia una grabación de ellas dos

-Hola!! Soy miranda jajaja- decia entre risas -por favor- paro el discurso escuchando que un paquete de papas fritas se abria- CORTALA BOLUDA, ESTOY GRABANDOO!!

-Y YOH EHTOY COHMIENDOH!!- se reconoció a ella misma, gritando con la boca llena de papitas, tan glotona como siempre

Otra vez las risas incontrolables Reian sin sentido alguno, pero ese signo de amistad habia quedado guardado en esa grabación

-Ok..jajaja sos una gorda, comiendo papas todo el tiempoo!

-Hay sorii gordah, sooyy..pfftt JAJAJ SOY GORDAH BOLUDAH- imitando ese asento que tanto le causaba gracia, no guanto mas, y todas las papas de su boca salieron volando

-NOOO QUE ASCOO JJAJAJAA- y por ultimo se escuchaba a miranda asqueada

Ya terminada la grabación, en la cual no se entendia un carajo pero le habia sacado una sonrisa, Emi cortó la llamada

Con pocas ganas se levanto se la cama, y bajo las escaleras en busca de algo para tomar

-Emilia, querida, que tal te fue? La pasaste bien con Miri?- al igual que ella, su mamá también la llamaba "Miri"

-Eh..si, como siempre. Nos presento a mi y a Fede su amigo de la infancia, que vino a visitarla

-Uuy, decime una cosa...estaba lindo?- la miro con una cara traviesa

-Que!? No, mamá...no andes pensando eso..a parte se le notaba que gustaba de Miri- dijo lo mas seria que pudo

-SALSEO! EMILIA, FORMAS PARTE DE UN SALSEOO!!- grito entusiasmado Tobi, su hermano. Tenia una obsesión con ese youtuber, por lo tanto repetia cada palabra que le resultara graciosa como...polla, salseo, mahe, o esas cosas

-Hay, callate. Fanboy de Rubius- se giró hacie él repondiendole con burla

-SE DICE CRIATURITA BOBAA- dijo defendiendo sus gustos

-Bueno, cuestión que..si, era lindo- lo ignoró otra vez

-Ahh, y Federico, como anda?

-Bien..- celoso, pensó

-Bueno, entonces todos contentos?

-Sip- fue hacia la heladera a servirse jugo- ma, voy a estar en mi cuarto leyendo, asi que no interrumpan

Después se que asintieran su mamá y hermano, cruzó el pasillo. Pero antes de ir a su cuarto, quizo saludarlo a su papá, que se encontraba en su oficina. Golpeo la puerta y pidiendo permiso entró

-Hola papi...llegue hace un rato

-Aja. Te escuche, como te fue?

-Bien, me diverti mucho. Y conoci a un chico

-Un chico? No hicieron nada malo, no?

-Ehh?? NONO!- el hombre río- era el amigo de la infancia de Miri

-Miri...me suena el nombre

-Ejem, Miranda papá. Ya vino a casa cientos de veces y no te acordas ni quien es

-Ah, tu amiga. La de pelo corto marrón clarito..si, ya me acuerdo

-Y a vos? Como te esta yendo?

-Dentro de todo, bien mi amor. Trato de hacerlo todo bien, para que el sueldo sea de todos- sonrió un poco cansado

Su papá era arquitecto, trabajaba casi todos los dias, y se pasaba la mayoria del tiempo en un cuarto sin ventanas situado al lado de las escaleras de la casa. Era un hombre muy amable, pero cuando se trataba de trabajo, se ponia serio y obsesivo. Todo lo hacia para su familia, a pesar de que tenian muchas deudas, trataba de dar lo mejor para recibir una buena paga, y facilitar las cosas. Ya se imaginan ustedes la clase de padre que es, siempre ocupado, pero lo bueno, es que lo hace con mucho cariño.

Su hija lo saludo, y subio de nuevo al cuarto

*En lo de Miranda*

Después de todo ese espectáculo, sentados en el piso, ninguno de los dos sabia lo que habia pasado. Estaban confusos, pero a la vez muy contentos, la verdad es que ellos no se esperaban nada de eso. Miranda ahora sabia lo que de verdad sentia sus amigo por ella, y Felix estaba dudoso de que si sus sentimientos fueron correspondidos o solo ella se dejo llevar

-Gracias- dijo él, decidido a empezar una conversación

-Ese...era tu favor?- respondió cabizbaja

-Eh?

-El favor que me pediste, era ese cierto?

-Si, te..-lo penso un poco antes de decirlo- te...gusto?

-Como podes ser tan hipócrita...-lo dijo con un tono serio y cortante, haciendo que él se ruborizara

-Perdón -ahora él era quien bajaba la vista mirando al suelo

-Perdón? Hablas en serio? Y yo supuestamente te tengo que perdonar porque "somos amigos", cierto?

-Yo..bueno, creo que si

-CREES!?? Que fue para vos nuestra amistad? Una mentira!? Un juego en el que sólo vos podias ganar!? En que mierda pensabas cuando me pediste ese favor? Amor correspondido? No jodas.

-YO SOLO PENSABA EN MI, OK? YO TE QUIERO PARA MI. SOY EGOISTA, MALCRIADO Y CAPRICHOSO. ME CONOSCO MUY BIEN Y LO ADMITO- gritó con desesperación hacia ella, mirándola a los ojos. Se quedó callado por un momento, respirando ajitado- No necesito a nadie más que me valla criticando, me escuchaste? Se muy bien a lo que quiero llegar

La agarró de la mano, y sin soltarla, se levanto del piso junto con ella. Besó su frente y antes de que Miranda pudiese darle su opinión ante tan grande declaración, tiró de su brazo y la acercó a él, dandole un abrazo profundo. Éste no era como los otros, se sentia diferente: más cálido y con más seguridad. Ese abrazo transmitía calma, era un abrazo de consuelo. Aunque la chica no se diera cuenta, de su rostro calleron varias lágrimas de comprensión e identificación.

No se dirigieron la palabra. Felix no dudo en pedirle un lugar para dormir, sabia que ella no se negaria, aunque muriera de la vergüenza. Su amiga sólo se limitó a hacerlo pasar la noche en el sillón viejo de color gris, junto a las mismas mantas con las que se habia tapado ella un dia antes.






Miranda, te soy sincera...[PAUSADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora