Begging For More Of You

Capítulo 2

Estoy tan enfrascado en mis pensamientos que no me doy cuenta de nada.

Pero alguien que llama a la puerta me saca de mi mente.

-Pase -digo mientras bebo el último trago que queda de mi whisky.

La puerta se abre silenciosamente dejando ver una hermosa cabellera marrón que reconocería incluso con los ojos vendados.

¡Bendita sea mi suerte! delante de mí está la gran y magnífica Hermione Granger. Y estaba hermosa...

-¿Harry? -me llamó con voz de niña pequeña- Dios mío...creí que nunca te volvería a ver...- dice en un susurro a la par que comienza a sollozar.

De un salto me levanto lo más rápido que puedo de mi asiento y corro hacia ella para abrazarla.

Obviamente ella me corresponde el abrazo.

Yo la elevo en mis brazos y le doy vueltas.

Estoy tan feliz que no quepo en la alegría tan inmensa que siento.

-¡Te he extrañado tanto! -grita entre risas mientras la hago girar- Bájame, me estoy mareando -me ruega sin parar de reír.

Yo le hago caso y la dejo con delicadeza en el suelo sin poder borrar la sonrisa de mi cara. Ella tantea torpemente mi cara sin creerse todavía que soy yo.

-Vaya...veo que sigues igual.

-¿Y eso es malo?

-Para nada... -con delicadeza apartó mi pelo despeinado (como siempre) de mi cara- así mejor... -susurra- ahora puedo verte toda la cara... -se ríe de manera suave.

-¿Cómo estás?, ¿qué haces aquí?, creí que estabas con Krum...

-Sobre eso...

-¿Qué?

-Le he dejado- admite bajando la mirada.

Vaya. Que comentario tan oportuno.

-¿Qué?, ¿por qué?- pregunté confundido, fingiendo asombro cuando en mi interior estaba dando saltos de alegría.

-Simplemente no funcionó... -respondió poniendo voz aguda sin quererlo.

-Herms... -ella alza la mirada y me mira a los ojos, creo que se asombró que la llamara así después de tanto tiempo-, sé que estás mintiendo.

-No es verdad -contestó de la misma forma que antes.

-Claro que sí lo es. Te conozco desde siempre...no ha habido vez que no pongas voz aguda cuando mientes -ella se sonroja, dejando ver lo hermosa que es pero a mayor escala de la habitual- venga, dime lo que te pasa...

Su cara se transforma. Si es que puede transformarse. Porque hace unos segundos estaba sonrojada y llena de ternura, ahora muestra decisión.

-No le amo...

-¿Qué? -Pregunté confuso.

-No le amo. Nunca le amé, nunca le amaré y nunca le he amado.

-¿Entonces por qué estabas con él?

-Por que me gustaba -otra vez esa vocecilla chillona...

-Hermione -la reprendí-, no me mientas.

-¡Quería dar celos!

-¿A quién? -Le pregunté celoso.

Todo rastro de mi amor por Ginny se ha esfumado. Y el amor que sentía y siento por mi mejor amiga abarca ahora todo mi ser. La he echado tanto de menos...