Alicia.

Capitulo 1.

Otro día más, todos iguales, mi padre en un estado de ebriedad grande golpeando a mi madre porque si y yo en mi habitación, encerrada sin hacer nada por el miedo. Todos los días son iguales, todos los días escuchando gritos y llantos, peleas, golpes y cosas así. Lo único que deseo es que llegue el día de mañana para poder temprano en la mañana partir a la escuela y no volver hasta la noche y evitarme todos estos líos.

Bueno, me presento, soy Alicia Miller, tengo 16 años de edad. Desde mis 12 años llevo esta vida, todo siempre me lo hago sola y siempre tengo que soportar a mis padres, toda mi vida con problemas familiares y cosas así. En la escuela siempre he sido una chica responsable, una chica que destaca por sus notas, pero siempre la chica solitaria, la chica extraña y que no tiene amigos.

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Son las 6:30 a.m y ya estoy en pie, lista para irme, con mi uniforme puesto, mi bolso listo y lista para bajar corriendo. Abro muy despacio la puerta de mi habitación y salgo de esta, al salir la cierro y le pongo llave, ya lista, afirmó bien mi mochila y bajo a toda velocidad por las escaleras, frente a la puerta principal abro y salgo por esta, empiezo a caminar a paso veloz dejando la casa atrás. Ya casi llegando a la parada del bus, me encuentro con la abuela Lucy.

-buenos días, Alicia.-saluda con amabilidad.

-buenos días, Señora Lucy.-respondo igual de amable.

Esta sonríe y yo solo asiento, sigo caminando hasta la parada del bus y ya ahí, me siento a esperar. Aproximadamente espere unos diez minutos hasta que llegara el bus. Me subí y salude moviendo mi cabeza de arriba hacia abajo, luego me dirigí hasta el ultimo asiento del bus y me senté. Empece a mirar el paisaje que pasaba mientas el bus avanzaba, primero era seco, tierra, suciedad, y pobreza, luego todo era verde, con colores cálidos y casas muy bonitas.
Al llegar, baje del bus y me dispuse a entrar en la escuela, empece a caminar por los largos pasillos que conducían a distintos salones, yo me dirigí al mío, a el salón 3-A.
Ya ahí, me fui hasta mi asiento -el último de todo el salón- y saque mi libro, me toca literatura, así que no creo que el profesor se moleste si me ve leyendo.
El profesor entro a paso lento. Ya frente al pizarrón hablo.

-muy buenos días chicos y chicas, espero que estén listos para una clase de lectura y mas lectura.-muy calmado se sienta y saca un libro.

Todos se sientan y regañando sacan cualquier libro disponible que esté bajo de su mesa. Todos empezaron a leer muy tranquilos, la clase iba calmada, sin ningún problema, cuando de la nada, la puerta se abre bruscamente y un chico de mechas negras y ojos azules entra por la puerta. El profesor le mira asustado y luego de recorrerlo con la mirada suspira y se para hasta quedar parado al lado de el chico.

-preséntate, eres nuevo ¿no?.-el chico asiente y luego habla.

-eh... S-soy Tyler Fitzgerald, tengo 17 años de edad y espero llevarme bien con todos.-habla este y al terminar sonríe débilmente.

-muy bien, ahora ve a sentarte con la señorita Miller.-dice el profesor.-levanta tu mano Miller.-añade y vuelve a sentarse.

Levante mi mano y el chico rápidamente se sentó a mi lado, lo mire curiosa y el al ver mi gesto sonríe cálidamente, avergonzada desvío mi mirada y prosigo leyendo, estoy llegando al final del libro, estoy bastante concentrada hasta que alguien toca mi hombro y me habla.

-disculpa, ¿qué se debe hacer?.-pregunta Tyler.

-debes sacar un libro y leer durante los.-hago una pausa y miro la hora de mi teléfono, faltan 40 minutos para que la clase termine.-durante estos 40 minutos que quedan de clase.

El profesor nos regaña por hablar y luego Tyler vuelve a hablarme, esta vez en susurro.

-gracias.-asiento y continuo leyendo.

Al terminar la clase, guarde mis cosas bajo la mesa y me pare tranquilamente, salí del salón y camine hasta el árbol del patio. Me senté y cerré mis ojos para poder descansar, cuando siento que alguien se sienta a mi lado, abro mis ojos de a poco y me encuentro con Tyler a mi lado, le miro confusa y luego digo.

-¿que quieres?.-cerré mis ojos nuevamente.

-ser tu amigo, me pareces bastante interesante y quería compartir contigo.-responde y yo abro mis ojos sorprendida.

-¿amigos? Déjate de bromas, solo vienes a estar conmigo porque no tienes con quien hablar, solo eso.-digo.

-no es eso, si quisiera estar con alguien mas, me habría ido con las chicas populares que me hablaron después de que salieras del salón.-habla este jugando con su negro cabello.

-solo perderás tu tiempo aquí.-hablo sin pensar.

-no lo creo, te vez simpática y como ya te dije, me llamaste la atención.-dice el y luego sonríe.-déjame ser tu amigo ¿si?.-añade.

-me da igual.-respondo de mala gana.

El ríe fuertemente y luego posiciona su mano sobre la mía, rápidamente intento sacarla pero el me lo impide.

-cierra tus ojos y disfruta de la brisa.-dice cerrando sus ojos y tirando se de espalda al suelo.

¿quien diablos se cree? ¿por que quiere ser mi amigo? ¿que vio en mi y no en las demás  que quiso estar conmigo?.

Bueno no es como si me estuviera pidiendo matrimonio, ni nada por el estilo pero, en 16 años no he tenido amigos y ahora que venga un chico nuevo y me diga que quiere ser mi amigo es algo muy poco creíble, realmente no se si creerle o no, pero voy a intentarlo.