siete.

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Tenías los ojos hinchados, con unas ojeras las cuales me dijeron que no habías dormido.

¿Por qué no estabas sonriendo como siempre? Cuando te ves tan linda haciéndolo.

Me senté en la banca del lado, te miré, me miraste, te sonreí, y tu sonreíste.

Mi corazón latía como nunca.

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⏰ Última actualización: Sep 06, 2015 ⏰

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