Ellas dos

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Capitulo 11: ellas dos

13 de mayo de 2014, 17:12 h

Solo queda comida y agua para tan solo 3 días a lo mucho, Germán ya marco una ruta hacia uno de los lugares donde cree que podría haber todo lo que necesitamos, está a unos 20 km de la unidad habitacional de donde estamos, las casas de alrededor están quemadas o bien, infestadas de infectados y de perros ya salvajes que se volvieron así cuando sus dueños muertos ya no les daban comida, los infectados los perseguían y cuando no hay comida en un ambiente abierto

Sigo con la misma ropa con sangre de ayer, era una camisa gris sin nada, unos jeans de mezclilla rectos, unos tenis de estilo urbano y mi celular algo manchado de sangre ya seca. Por lo visto este celular aun tiene algo de batería, un 50% para ser exactos, no tiene señal ni internet pero toda la información como contactos, música, fotos, y datos de internet o de seguridad. Quisiera conservar este celular un tiempo solo para escuchar música pero para que quiero uno que se le acabara la energía en menos de una hora y que no se le puede poner a recargar sinceramente siempre quise ver como explotaba una pila pero creo que es algo muy peligroso además de que tiene algunos químicos "sospechosos" así que lo prefiero dejar en un lugar aislado y que pasen los años para ver qué sucedería. "adiós mentiras de internet, mentiras de amigos, gente que te perjudica, novia o novio, modas tontas de las redes sociales, fotos para llamar la atención, y por supuesto, adiós al mayor invento de la humanidad, el internet"

Abi está hablando con Sarah en un cuarto aparte, al parecer no se han dado cuenta que las estoy observando pues, la puerta está algo abierta por unos centímetros. Aun me siento mal por lo que hizo ella ayer en la tarde, oigo su conversación y es algo normal pero ya no es de novios, a donde iremos, celulares, quien me cae mal, como voy a pasar la materia etc.

- Abi, perdí sangre y casi me desmayo y aun así piensas que es bueno hablar sobre nuestro pasado, sobre mis amigos y toda esa maldita mierda que no vale la pena, pues no, no es bueno que hablemos sobre eso

- Perdón, solo quería hacerte sentir mejor

- Lo sé, simplemente que, no debí haberle gritado a tu hermano, quizás si tenía razón, todos ustedes son lo único que me quedan,

Pensé que si ya me perdono podría traerles un poco del café que quedaba en la cocina, no me gusta, simplemente soy amable. Quedaban escasos 10 litros de agua, utilice lo más poco que se pudiera pues no quería gastar demasiada agua, con la gente que la desperdiciaba y ahora que hay menos agua que tratar prefiero usar nada de ella. Tome un frasco lleno de café que pienso guardare en mi mochila, algunos sobres de azúcar y empecé a prepararlo. Cada vez que mi madre se enfermaba o mi padre de igual manera yo les preparaba un café, y ellos decían que preparaba muy bien, yo no tengo un método claro y tampoco distingo el sabor pues todos los cafés son para mí iguales.

Puse dos tazas de café en una bandeja de plástico y me encamine hacia donde ellas estaban. Se encontraban todavía hablando pero algo temerosas, hasta que Abi dijo algo

- Sé que podrás tener miedo de todo pero no cuando estés conmigo, pues yo te intentare proteger

Acerco lentamente su rostro al de Sarah y luego la beso, seguían con ese beso y me quede pensando en la cocina con esas dos tazas de café hasta que Isaac pasó y me pregunto

-¿puedo tomar una taza?

Yo afirme moviendo la cabeza y algo sorprendido mientras el...

-gracias, mmm que buen café

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