Final

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Avancé calle abajo hasta la tienda de mascotas de Bakery Street, Dogz . En cuanto entré todos los perritos se avalanzaron contra mi y me tiraron al suelo. Jugué un rato con ellos hasta que decidí buscar la pista .La busqué y la busqué pero nada, no estaba. De repente vi una sombra que parecía ser de Rufus, un pastor alemán muy travieso. Salió de la tienda y le perseguí hasta un callejón en el que se encontraba la trastienda de Dogz. Me fijé en Rufus, que parecía mirar algo. Había encontrado la pista que tanto me había costado encontrar. Estaba escondida en un libro de guía de mascotas, en la pagina 1. Le di las gracias a Rufus comprándole una golosina para perros en Dogz y lo devolví a la dueña de la tienda. Miré la pista y la nueva dirección era: Regent street.Antes de ir para Regent Street di la vuelta a las pistas que llevaba y les di la vuelta para ver que mensaje escondían.De momento llevaba:

  "Si la tienda quieres encontrar, seis pistas deberás buscar, y los numeros que hayas encontrado,  deberás sumar al lado, al final algo extraño pasará, y te sorprenderás. El final ya está llegando ¡Ve con mucho cuidado!"  

En ese momento supuse que la tienda estaba en Regent Street. Me recorrí todo regent Street de arriba a abajo(Si que era grande esa calle) hasta que la vi. ¡¡¡Por fin!!!  Ahí estaba. Me aprésuré y marqué rápido el código 135. Ñiiiii . La puerta se abrió. ¡Ya estaba dentro! Cuando entré me recibió un señor con un "Hola" de lo más familiar y el intenso olor a chocolate me debilitaba por momentos. Ese chocolate olía como el de Cofee's...

La tienda estaba llena de estanterías por ls que asomaban frasquitos de cristal. De cada frasquito colgaba una eqtiqueta. Pero...¿Quien era el vendedor que me resultaba tan faliliar? Detrás del mostrador asomaba la cabeza de...¡Fred!

Me explicó como funcionaba la tienda ( mientras tomábamos un chocolate, claro) y me dijo que podía pedir el sueño que quisiera. También me explicó que me despertaría al cabo de diez minutos con un despertador.Un destello me cegó. Procedía de un frasquito que tenía bolitas decolores dentro.Parecía decir "escógeme a mí ,escógeme a mí".Lo elegí y inmediatamente una fuerza me cerró los ojos y me sentí transportada a un mundo paralelo donde todos eran felices.


La tienda de los sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora