La escuela no es la cosa más sencilla que puede haber y eso lo sabemos todos, pero para que quejarme si al fin y al cabo no quitaran las tareas, trabajos, exposiciones y maquetas, no gano nada al hacerlo.
Termino de sacar mi libro de física de mi casillero y lo cierro.
-¡Hey, Nate! -dí un salto ya que no me había percatado de la presencia de el tarado de Sebastián, mi mejor amigo, que es tan escurridizo que no te das cuenta cuando llega a un lugar.
-No aprendes -dije resignado, nunca dejará de aparecer sin sorprenderme-. Hola, Sebas.
-Y, ¿ya tomaste valor y le hablaste a...? - no dejé ni que terminara.
-No, pero, -di un suspiro- ya lo intentaré.
-Nate, sabes bien que esto no es sano, deberías de resignarte porque tu mismo sabes lo que pasará más adelante y no es nada bueno, sólo te queda dejar esto y...
-Sebas, mejor cállate. Tú opinión sabes que me importa bien poco, lo hecho, hecho está, y tu opinión no me hará cambiar de parecer, lo sabes bastante bien.
-Ah -suspira él- Bien, me rindo, Nate. Lo reconozco, no te valgo nada.
-Que bien, Sebas, que bien que lo entiendas -Bromeo, ya que Sebas sabe que el me cae muy bien.
Y bien, este soy yo, Nate, el simple Nate, que nada ha hecho por la vida, sino vagabundear, como el chico que soy y seré.
-¡Qué! ¿No, como pudiste? Anna, te lo repetí, no iré a esa patética fiesta, ya sabes, ¿Por qué me compraste el vestido, si lo dejé claro? Ah, Anna, eso no es de amigas -Escuché a una chica, su voz se me hacía familiar, así que no dudé de quién se trataba.
Era April, la única chica peliazul del instituto, que disfrutaba cada segundo de su preciada vida, era linda, lo admito. Caigo bastante fácil, lo sé.
-No, eso no es de mejores amigas, Anna. Adiós -Dijo y escuché que caminaba despacio, o trotaba, más bien. Y antres de que empezara a correr como de costumbre imagina que hice, si la llamé.
-Hola, April -dije y sentía que mi sonrisa de estúpido crecía más en mi rostro al momento en que se giró y me sonrió.
-¿Qué hay, Nathaniel? -dijo mirándome.
-No seas tan formal conmigo - la miré-, me hablas como si me acabas de conocer.
-Ok Nate, hablaría más contigo pero debo de hablar con Anna, siempre cree que se saldrá con la suya -dijo con una linda sonrisa y miró a mi lado, oh claro ahí estaba Sebastián-, Adiós.
Me dió otras de sus hermosas sonrisas antes de irse, me tiene loco.
-Hermano pareces un tonto cuando la vez -dijo Sebas con un tono de burla en su voz.
-Tal vez si sea un tonto -hice una pausa-, un tonto enamorado.
N/A:
Hola Jo y Sophie reportandose y esperando que les haya gustado nuestra propuesta. Gracias por sus votos y comentarios los apreciamos mucho.

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The Proyect April Harris
Historia Corta«No se le puede poner fecha a una persona para enamorar a otra pero no tengo de otra, te queda poco tiempo» Hermosa portada hecha por: @tributegomez