Mundo Destruido ||Ruben Doblas & Tu||

¿Donde estoy?

Narra [T/N]

Me desperté con un fuerte dolor de cabeza, al fijar la vista en todo parecía que estaba en un hospital abandonado.

-Me alegro que despertaras. -Se escucho una voz femenina.

Alzó la vista y era una chica con traje de militar con un arma en su espalda.

-¿Don..dónde estoy? -Dije con las pocas fuerzas que tenía.

-Tienen suerte que los hayamos escuchado gritar. -Me sonrió.

-Dije quien eres. -La mire fija.

A ella se le borro la sonrisa.

-Me llamo Morena, este es un poco de mi equipo, nosotros salvamos a personas como ustedes, pérdidas. -Dice ofreciendome la mano.

-Me llamó ______[T/N]. -Digo en un tono serio. -¿Dónde están mis amigos? -Preguntó.

-Tranquila ellos estan bien. -Me observa de arriba para abajo. -Estan siendo curados, unos de ellos tenia un raspón, nada grave, el otro parece que lo mordió un caminante.

Dí un largo suspiro.

-Quiero verlos.

Ella me miro y llamó a un tal Rubén, ese chico se acerca a nosotras corriendo.

-¿Me llamabas? -Dice el serio al igual que ella.

-Quiere ver a sus amigos. -Dice. -Ve a llevarla a la sala de cura.

Él asiente y me hace una señal para que lo siga.

Yo la miro a ella, me sonríe y se da la media vuelta.

Sigo al tan chico dónde me lleva a una pieza abandona como el edificio.

-Allí se encuentran tus amigos. -El me sonrie.

-Gracias. -Le devuelvo la sonrisa. -Me llamo ______[T/N]

-Rubén Doblas. -Me estrecha la mano. -Bienvenida.

Dice eso y se retira....

Me acercó lentamente dónde están mis amigos.

Cada paso que hacia era una camilla sucia, vieja por los costados y uno que otro semi muerto.

Seguí así, observando la cara de sufrimentos de algunos, cuándo me detengo por un rostro familia.

-¿_________? -Abre los ojos el sujetó.

-Hola Rodrigo.

-¿Dónde estámos?

-No puedo responder concretamente a tu pregunta, ya que todavía no lo sé pero por lo que ví es un hospital.

-¿Quién nos trajo hasta aquí?

-Un equipo.

-¿Hay más personas? Lo que significa que no estámos tan perdidos, ¿no?

-Exacto.

-Anne está del otro lado con tu amigo.

-Gracias.

Me estába por marchar pero siento como me tiran de la remera.

-¿Creés que todavía hay esperanzas?

-En este mundo tan ruidoso, sé que hay algo de esperanzas.

Él me sonríe y me voy.

En mi recorrido en la busqueda de los demás me topo de Rubén.

-Hola, ¿ya encontraste a tus amigos? -Me saluda.

-Jaja, no todavía no.

-Suerte en eso.

-Gracias, ¿y tú que supuestamente haces aquí?

-Pues, digamos que soy cómo un médico.

-Pero también te mandan a luchar.

-No. -Ríe. -Mi esposa no me lo permitiría.

-¿Esposa? ¿En todo este lío te casaste?

-No, nos casamos hace mucho.

-¿Por qué siento que es la chica que me ayudó?

-Porque es ella. -Sonríe.

-Qué romantico sobrevivir a un apocalipsis zombie juntos.

-Bienvenida a nuestra luna de miel.

Me río, la chica sin duda tiene suerte.

-Va a ser mejor que te dejé, así sigues con lo tuyo.

-Lo mismo digo, tendríamos que seguir esta charla algún día.

-Por supuesto. -Sonrió.

El me guiña el ojo y se va.

Sigo todavía mi rumbo y encontré a Gabriel y Anne juntos.

Gabriel acostado en una camilla duermiendo y Anne en una silla haciéndole compañía.

-Hola. -Susurró, provocando que Anne se despierte de su ligero sueño.

-¡Ay _______! Me alegro tanto en verte. -Me abraza.

-¿Estás bien?

-Sí, él que no está tan estable es Gabriel. -Fijamos nuestras miradas hacia dónde él se encontraba.

-Va a mejorar, él es fuerte.

-¿Cómo esta Rodrigo?

-Él esta bien, no hace mucho fui a verlo.

-Gracias a diós, no sé que seria sin él.

-Nunca pregunté cuál es la relación que los une.

-Somos primos.

-Mi familia esta toda desaparecida, es lindo tener a alguien conocido en estos momentos.

-Lo siento tanto.

-No importa, va a ser mejor que nos vayamos y los dejemos sólos, ¿no te parece? -Pregunté.

Ella asintió y nos retiramos de la zona de enfermos e heridos.