La Fuerza Del Amor

3. Solamente Chris

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Solamente Chris

Era un domingo por la tarde en el apartamento de Chris Redfield donde se acostumbraba a hacer una reunión "familiar" se podría decir a la cual asistían León, Sherry, Piers y por supuesto su hermana menor Claire con quien temporalmente comparte dicho apartamento.

Los cinco se encontraban en la mesa del comedor disfrutando de una rica rebanada de pizza con la cual era acompañada de una cerveza, todos reían por una anécdota contada por Sherry.

—Eso sucedió por sacar una soda de lata de la maquina expendedora. — dijo la chica rubia

Piers seguía riéndose dado que recordó algo similar hace un par de días.

—Tu historia me recordó a Piers cuando la máquina expendedora le lanzo las monedas. — afirmo Chris

— ¡Capitán! — exclamó Piers algo ruborizado

Piers siempre le ha tenido respecto a Chris porque ha sido su mentor y le tiene cierta admiración por todos los logros que ha tenido en su trayectoria en la B.S.A.A.

—Venga Piers, solo dime Chris. — dijo Chris

Todos miraron a ver al chico y él se sentía un poco nervioso. Para Piers era muy importante llamarlo Capitán porque era su jefe de misiones la mayor parte del tiempo.

Continuaron comienzo pizza y bebiendo cervezas por otro lado Piers se levantó del comedor porque quería estar unos momentos a solas, camino hacía unas puertas de vidrio, abrió dicha puerta y al salir sintió el aire fresco del viento de la noche. Poso su mirada hacia al cielo negro con algunas pocas estrellas.

Abrió la bolsa de su chaqueta para sacar una cajetilla de cigarrillos era su relajación en un momento de estrés, pero aquí se sentía un poco preocupado desde un tiempo tiene unos sentimientos extraños hacia su capitán, no lograba descifrarlos por completo, le frustraba demasiado encontrar en esa situación, puso el cigarrillo en la boca y saco un encendedor para prenderlo.

Escucho el rechinar de la puerta de vidrió se giró para ver de quien era y resulto ser su capitán con una expresión en su rostro de preocupación.

— ¿Por qué te fuiste del comedor? — pregunto Chris

—Quería coger un poco de aire fresco. — respondió Piers

— ¿Fumando un cigarrillo? —. Chris extendió su mano para que Piers le diera uno y él asintió.

Ambos se encontraban en la terraza fumando un cigarrillo mientras contemplaban la luna, ninguno de los dos se limitaba a tener algún tipo de conversación, era bastante incómodo para Chris.

—Piers somos amigos desde hace un tiempo puedes llamarme Chris por favor. — comentó Redfield

—Lo sé, pero le tengo cierto respecto porque ha sido mi mentor desde que entre a la B.S.A.A. — dijo el chico.

—Vale, pero repite después de mí. Chris.

—Capi... Chris.

Chris movió la cabeza hacia ambos lados y Piers sonreía nerviosamente le costaba un poco de trabajo en llamarlo por su nombre sin embargo con el tiempo lo lograra dado que se la ha hecho una costumbre por llamarlo de esa manera.

—Vamos por un buen camino Piers. — comentó Chris. — Con el tiempo mejoraras. Hay que entrar porque se preguntaran por nosotros.

Piers asintió.

Esperaba dejar atrás esa palabra para poderle decir por su nombre, además de esos sentimientos tan repentinos que ha encontrado nuevamente podría ser amor, pero no había muchas señales para confirmar ese sentimiento que todos sentimos por una persona en especial.