Caminamos un buen tramo tomadas de las manos, sentía una seguridad inmensa al estar con ella, esa paz interior que hacia bastante tiempo no tenia, nuestro contexto era hermoso, plantas de cientos colores, espíritus vagando por todas partes, Asami, árboles, Asami, centelleos de luces, Asami...
Nos sentamos en la rama de lo que parecía ser un gran arbol, tan alto qué no alcanzaba a ver su copa, caían despacio hojas de colores pastel. Asami estuvo callada un buen tiempo, sentí la necesidad de preguntarle:
-¿todo bien?
-korra quiero hablar contigo desde hace algunos días pero- suspiro- con las celebraciones y demás no me ha dado tiempo, y ahora que estamos las dos por fin juntas ha llegado el momento de decirte que.. -se detuvo asami al hablar.
-¿qué es eso que necesitas decirme cariño?- le pregunte intrigada.
-nunca pensé que llegaríamos a ser algo más tu y yo, es decir antes eramos rivales por mako y el hecho de tener su atención, yo solo quiero que sepas que ya no siento nada por el.
-ammm asami, no lo dices muy convencida, se que lo que hubo entre ustedes y lo que hubo entre el y yo no es fácil de olvidar o ignorar, pero te aseguro que la única persona con la que quiero estar es contigo. Tú eres ese soporte armónico en mi vida, eres el complemento que me hacia falta, ese vacío que no podia llenar con nada.
Los ojos de asami se veían acuosos, entrelazo sus delicados dedos con los mios.
-te quiero korra, yo se que tú no me fallarías.
Le abraze y ese fue el mejor abrazo más confortable y sincero que alguien me había dado en mucho tiempo.
