Era 1970 cuando mis papas fallecieron, quede agobiada por la soledad y aprendí que esperar de las personas era el mayor error que podíamos hacer como humanos.
Al crecer y darme cuenta lo dura que es la vida aprendí que los amores son como el oxígeno, ahí están pero el día que se acaba te matan aunque en este caso te destroza, dicen que debemos buscar a alguien que nos alegre la vida pero yo me pregunto ¿ por qué mejor no le alegramos la vida a otros?, llegan esos instantes donde nos damos cuenta que el único amor del que debemos esperar es el de nuestros padres y Dios, pero, que puedo esperar yo que nunca los tuve? O si los tuve pero no tuve quien me enseñara el verdadero significado del amor pero aquellos que lo tienen no lo notan, porque vivimos en un burbuja donde el único amor que queremos y del que esperamos esta fuera de nuestra casa, pero no sabemos que somos felices desde que nacimos con nuestro primer llanto, con alguien que estuvo esperándonos 9 largos meses sufriendo por nosotros, y quizás nosotros suframos 9 largos meses para ser más felices de lo que ya somos, quizás no tener papas muchos dirán que fue lo mejor que me paso, pero mis amigos capaces de ponerse en mi lugar saben que no es fácil, porque si sufrimos por un amor de calle por decirlo así quien secara nuestras lagrimas o quien nos dirá aquí estoy para ti o quien simplemente con la más mínima bobada intentara arreglarnos el día o simplemente le doliera lo que sentíamos y demostrara que le importaba, si a pesar que no tuve a mis papas el tiempo que esperaba y estaba realmente pequeña para entenderlo, pero ahora que lo entiendo los necesito no solo para que limpien mis lágrimas o para que me resuelvan cosas si no para darles el amor que yo necesitaba darles para llenarlos de alegría para simplemente hacer que eso 9 mese valieran la pena aunque los papas dicen que somos una bendición pero ellos son la felicidad en carne.
A los 10 años un familia me adopto claramente yo entendía que ellos no eran mis verdaderos papas, quizás era egoísta de mi parte pensarlo así o llegarlos a ver como unos simples amigos que me dieron ropa, comida y un hogar relativamente feliz, pero en el fondo necesitaba algo, algo que mi "corazón" pedía y necesitaba a gritos, algo que cambiara mi manera de pensar, quizás algo que me enseñara a valorar lo que una vez tuve y volvía a tener.
Me enamore por primera vez a los 15 a esa edad todo era tan lindo y majestuoso yo era una princesa o eso me decían, él era bajo más o menos de mi estatura, cabello ondulado, ojos cafés, quizás lo que me enamoro de él, era la manera en como era conmigo y nunca fue con ninguna otra, si lo puedo decir así porque fuimos mejores amigos durante 5 años, yo conocía todo de él o bueno lo que él quería que yo conociera y cada vez para mí era más interesante, él era una cajita de misterios, los misterios que tanto me encantan de los que un día me enamore, pensé en ese instante que era feliz y todo gracias a él o eso decían mis pensamientos, duramos 5 largos años lo que quedaba de escuela y cada uno tomo su rumbo yo me fui al exterior y él se quedó viviendo sus sueños o tratando de conseguir un amor como el nuestro o eso espero.
Cuando cumplí mis tan esperados 21 años solo esperaba mi independencia y ser capaz de construir un hogar donde se fuera feliz con tan solo llegar al mundo aunque todos en ese momento los somos pero porque no serlo toda la vida? Y me di cuenta que esos largos años al lado de fui feliz pero me volví dependiente a lo que mi mente creo, ahora que no lo tengo lo extraño pero y si él no me extraña a mí? O si ya tiene a otra persona? Mientras yo seguía con mi vida hasta que un 31 de octubre un Halloween conocí a un chico encantador capaz de buscar su felicidad sin depender de nadie o eso pensaba el pero yo solo decía en mi mente todos dependemos de todos o eso nos muestra la sociedad porque o si n, no o buscáramos a alguien que nos quisiera o tal vez nos aceptara como éramos, en fin él y yo empezamos a salir y nos dimos cuenta de que en ese tiempo que pasábamos juntos éramos felices, y decidimos ser novios paso el tiempo y claramente soy de esas personas que valora cualquier cosas hasta un pedacito de papel de mi nombre junto a él, esos son los regalos que me mantienen viva aunque suene muy cursi, me llena de satisfacción y alegría porque ahí demuestra que le doy un poquito de felicidad y el me da a mí también más de la que ya teníamos.
Y ahí fue cuando note que el amor y la felicidad la tenemos desde que nacemos pero de nosotros depende lucharla y conservarla o ser infeliz y perderla, que nuestra felicidad y amor no sé cómo el oxígeno que una vez que se va no vuelve.
