Los dias se convertian en semanas, las actividades diarias aburridas, y las pesadillas se volvian rutina, era de casi todos los dias solo que con diferencias notorias pero aun asi insignificantes, resultaban lo mismo fuera lo que fuera, lo que me dio un gran alivio fue ya no haber tenido noches de pesadilla con mi madre, la cual ha sido la peor que he tenido despues de la de mi hermano, pero claro.. tuvo que pasar, ya habian pasado 3 semanas desde la ultima pesadilla que realmente me altero, nunc aolvide esos ojos rojos, esa cosa que nunca pude olvidar, aparecio otra vez, no podia creerlo, pero asi fue; fue exactamente como la pesadilla de mi madre, me levante a mitad de la noche viendo por la ventana y mi madre a mitad de la calle, corri hacia las escaleras y abri la puerta lo mas rapido que pude, no habia carros, mi madre parada a media calle viendome fijamente con la mirada perdida le grite para que se alejara de la calle que era peligroso, hasta que las palabras se me cortaron y ya no supe que decir, detras de ella salio otra persona, era mi madre, si es que a eso se le puede llamar madre, tenia la misma ropa, misma apriencia pero tenia una sonrisa muy peculiar, era enfermiza se puso a lado de mi madre, la volteo a ver y la tomo de la mano y la llevo conmigo, empezaron a hablar las dos al mismo tiempo mi madre hablaba pero es como si no se diera cuenta de que lo estaba haciendo, y claro, la copia de mi madre seguia hablando pero hablaba con una voz mas grave de lo que habia imaginado sin quitar esa sonrisa tan perturbadora que tenia, solamente exclamaron; "mi querido ciervo, tu reinado te espera..." me quede mas impresionado que asustado, solo acercaron sus manos heladas a mi rostro acariciando mi mejilla, senti ganas de llorar al ver a mi madre actuando como espejo junto a esa cosa, despues de eso solamente el ente se volvio a poner detras de mi madre de igual manera en la que]@] aparecio, mi madre cobrando la conciencia parpadeando rapido y cayendo al suelo, me apresure a asistirla estaba medio dormida sin saber donde estaba solo me miro y se durmio, tuve que cargarla y llevarla hasta dentro de la casa hacia su habitacion, no habia nada de ruido en la casa, solamente bastante frio, la recoste en su cama y le cambie la blusa por si acaso, pero al momento de quitarsela pude presenciar algo que me causo demasiada intriga y preocupamiento, moretones y rasgadas en toda su espalda y parecia que habia una huella de una mano si es que a eso se le puede llamar mano.. estaba deforme, lo que eran dedos parecian huesos y tenia como siete dedos el doble de largos que unos dedos humanos, me intrigo y asusto bastante, pero no quise insinuar nada, ella estaba tan cansada como yo, me quise dormir, aunque no recordé que me fui a dormir, solo desperté al momento de ver esas marcas en ellas y salir de la habitación de mi madre, me levante de mi cama con otra ropa, no recordaba lo que había pasado despues de eso, baje y mi madre estaba cocinando, sin decir nada me dio le desayuno, mi madre cocina delicioso, siempre lo ha hecho muy bien, pero este dia no lo hizo como de costumbre, la comida estaba mal hecha y con muy mal sabor, no me lo estaba comiendo tal cual, después bajo mi hermano Sebastian bastante animado ya que iria a la casa de uno de sus amigos a celebrar su graduación, cuando probo su desayuno me susurro lo mismo que pensé "como que ahora mama no le salio el huevo no bro?" nos quedamos mirandonos raramente y mi madre como si nada, yo tenia que ir a trabajar, despues de la hornada de trabajo, al entrar a la casa supe que algo estaba mal, habia demasiado silencio por parte de mi madre, sabia que mi hermano estaba en su fiesta pero mi madre nunca esta tan callada, me fui a la sala y la vi sentada en el sillon que esta hacia la tele pero esta vez lo volteo hacia la ventana, tenia la mirada fija hacia la ventana totalmente en silencio, no reacciono a mi presencia, no sabia que estaba viendo hasta que voltee la mirada hacia la ventana, un enjambre de moscas estaba en la ventana queriendo entrar a la fuerza, pero de pronto todas las moscas volaron, como si las hubiera espantado, se me hizo bastante raro, de pronto se me ocurrio voltear a ver a mi madre y me miro con esa mirada profunda y una ligera sonrisa que era muy perturbadora, era bastante ligera pero aterradora a la vez, nunca habia hecho ese gesto, y despues volvio a ver a la ventana, me quede bastante intrigado por ese acontecimiento, entonces sucedio... Desperte en mi cama levantandome bastante rápido y corriendo a la sala, el sillón estaba en su lugar de siempre y mi madre estaba en la cocina preparando la merienda, solo me acerque a la cocina a preguntarle "Como estas mama?" saludándola de beso en la mejilla, me respondió bastante fría "bien" fue lo único que dijo, la sentia muy fria, pero pasaba por mi mente que lo que habia pasado con las moscas era una pesadilla, empezaba a dudar sobre la realidad, que era real, y que no? MI madre realmente estaba en problemas? O simplemente era mi mente que quería verme sufrir
Durante la semana siguiente notaba a mi mama bastante rara, casi no hablaba con nadie, se encerraba en su cuarto y tenia una actitud bastante rara, varias veces la veía perdida viendo a una ventana o haciendo garabatos en una libreta, me estaba preocupando y su aspecto no favorecía para nada su condición, ojeras, el cabello maltratado, moretones en varias partes del cuerpo, estaba realmente angustiado, llame a un doctor en acto de desperacion pero el doctor no detecto nada raro, solo le recetó unas pastillas 2 veces por día, claro no le hizo caso al doctor, como si mi angustia fuera demasiado las pesadillas nunca terminaban, y cada vez empeoraban, cada vez eran mas intensas y reales, en varias ocasiones no sabia si se trataba de una pesadilla o realmente estaba pasando
Llegue a un limite, las alucinaciones...
Continuara.
ESTÁS LEYENDO
Cuando la luz se apaga.
ParanormalUna historia salida de una mente fuera de este mundo y del horror