☯ f i n a l a l t e r n a t i v o ☯

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Ethan se había convertido en el amigo de Julio después de ayudarla y defenderla de su padre.

Ahora, seis meses después de ese incidente, Ethan estaba nervioso.

¿Por qué estaba nervioso? Hoy se le iba a declarar a Julio. 

Lo había planeado durante mucho tiempo y por fin estaba listo. No sabía si ella sentía lo mismo por él pero no le importaba, ya habían pasado muchas cosas juntos y enamorarla no sería un problema para él.

Ethan se dio cuenta de que estaba verdaderamente enamorado de Julio cuando ella intento suicidarse.

Ese día había clases y ella no había ido, eso lo preocupo así que se saltó las primeras clases para ir a verla; gran sorpresa se llevó cuando llegó al cuarto de Julio, subiendo por la enredadera y entrando por la ventana, y verla colgando de la lámpara del cuarto. 

Él corrió para bajarla y llamó al servicio de emergencias con rápidez, dando la dirección y rogando al cielo que ella no muriera, que los paramédicos llegaran a tiempo y ella soportará.

El vacío que sintió cuando la vio tan pálida y sin respirar había sido espantoso, nunca había sentido algo así y no quería volver a sentirlo jamás.

No había podido dormir y no había manera de que lo sacaran de la sala de espera hasta saber que ella estaba bien.

Los doctores le habían dicho que llegó justo a tiempo, si ella hubiera estado un minuto más colgada no habría manera de salvarla.

Por otro lado Julio estaba sintiéndose horriblemente adolorida y con una gran dificultad para respirar. 

Cuando abrió los ojos y se encontró con una habitación de hospital recordó todo de golpe. 

El grito que había esperado saliera de su boca nunca lo hizo, en cambio sintió un mareo tan intenso que tuvo que cerrar sus ojos para poder respirar sin necesitar vomitar.

Cuando pudo volver abrirlos se encontró con Ethan y ella lo abrazó mientras lloraba.

Regresando al ahora, a él siempre se le hacía un nudo en la garganta de sólo recordar como había estado tan cerca de perder a su primer amor.

Dejando los pensamientos negativos, tocó la puerta de Julio, esperando que abriera con impaciencia.
Ahora vivía con su tía, ellos habían denunciado al padre de Julio y se encontraba en la cárcel con una condena de diez años por abuso sexual.

Ella salió arreglada con unos skinny jeans y una camisa holgada, dejando sin respiración a Ethan.

Disimular qué no miraba a Julio le estaba costando más de lo que nunca recordara.

Después de un saludo pequeño, ambos se fueron al auto del padre de Ethan que le habían prestado al nombrado anteriormente para poder llevar a la ojiverde al lugar que estaba algo alejado de la ciudad.

El camino estuvo lleno de  conversaciones sin sentido, de esas que sólo tienes con las personas en las que más confías.

Cuando llegaron al lugar planeado, un mirador en la montaña, Ethan saco de la parte de atrás un telescopio junto con un par de sillas.
Tenía planeado ver las estrellas y tener un picnic nocturno, algo raro pero diferente.

Coloco las sillas y el telescopio con la canasta de picnic al lado mientras veía como Julio admiraba maravillada el cielo por la lluvia de estrellas fugaces que había ese día.
Ethan había planeado todo meticulosamente.

Pasaron quizás unas dos o tres horas viendo las estrellas y comiendo de apoco cuando Ethan decidió que era hora de confesarle a July, el verdadero nombre de Julio, lo que sentía.

—¿Julio? —la chica volteo a ver al castaño con una sonrisa.
—¿Qué pasa Clare? —Ethan todavía no se acostumbraba a que lo llamara por su apellido. Se le hacia raro.
—Bueno es que yo... lo que pasa es que... ¡ahg! ¿Cómo se supone que me voy a declarar sin saber que decir? Prepare un discurso para poder decirlo y no me acuerdo de nada por los nervios... —mientras él seguía divagando sin darse cuenta de que había dicho que estaba enamorado de July, la cual estaba medio en shock y medio en euforia. Ethan estaba enamorado de ella. De alguien como ella.
—¿Estás enamorado de mí?
—¿Eh?
—¿Estás enamorado de mí? —repitio la pelinegra.
—Bueno se siente como eso...

Julio comenzó a llorar, no podía creer que alguien la quisiera, no después de lo que le hizo su padre, no después de que intento suicidarse. ¿cómo era eso posible? Y menos alguien tan especial, amable y único como Ethan; le parecía todo tan... cuento de hadas cliché.

—Shhh, no llores July, por favor.
—Es que no puedo creer algo así.
—¿Por qué no crees que esté enamorado de ti?
—Sólo mirame, no soy como las otras chicas. Tengo tanta basura emocional que todas las noches grito en medio de pesadillas. ¿Por qué alguien querría enamorarse de mí?
—Cariño, eres de las mejores personas que conozco. Única e iremplazable.
Como la pieza de un reloj.
Y yo quiero ser ese reloj que no puede vivir sin ti.
—¿Qué significa eso? ¿Quieres que sea tu novia?
Y Ethan la besó, lento y firme. Con cariño y demostrándole todo lo que sentía por ella. Al separarse del beso le susurró:
—¿Eso te lo aclara?
—Claro que sí, novio.
Y ella lo besó.

Julio {one}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora