CAPITULO I

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Despertar en un cuarto blanco con cables a tu alrededor vestida con un camisón azul, cubierta por sabanas del mismo color de la habitación y no comprender que haces ahí, solo quedarte callada y con la intriga de no recordar nada; el silencio es tu única compañía en aquel lugar desconocido para ti. Tener ganas de salir corriendo, pero que tus pensamientos y tu ser te detengan, porque las respuestas que necesitas para calmar tus nervios se encuentran en aquel lugar misterioso y sin ninguna pinta de ser fiable.

Hasta que oyes que la puerta de la recamara desconocida, que ni si quiera la habías notado se abre, dándote la esperanza de comprender tu estancia en este lugar.

Al momento de hacerlo entran 2 mujeres de media edad con camisa y falda blanca y un pequeño gorro, 2 hombres altos de la misma apariencia de edad y un tercero con rasgos más viejos con batas blancas y con rostros muy extraños, se quedan parados en la puerta examinándome como si lo que estuvieran observando fuera una maravilla, pero el caso es lo contrario ya que me siento incomoda y con dolores en mi interior, pero lo que me causa más confusión es el repentino cambio de gestos, como si de la nada verme en estas condiciones les causara pena; en mi rostro se plasma un gesto de no comprender absolutamente nada. Sigo con la misma expresión hasta que el Hombre más viejo de los tres decide adentrarse más, parándose justo delante de mí, pues creo que al notar mi cara de no comprender que pasa decide dar el primer paso y supongo que aclarar mis dudas no está de más.

-Hola... - el hombre se detiene a mirarme con la palabra en la boca, y yo solo frunzo la frente tratando de comprender su reacción y el motivo de su pausa; y por fin me atrevo a decir la palabra que viendo los rostros de los vestidos de blanco esperaban con ansias.

-Hola. ¿Dónde estoy?¿quién es usted?- como bien lo pensé, las miradas de los que se encuentran adentro del cuarto me miraron fijamente inspeccionando cada uno de mis movimientos que hacía y el hombre que inicio la conversación se veía decidido a continuar.

- Mi nombre es el Dr. Tom Smart y estoy encargado de atenderte, y ver tus mejoras.- eso me tomo por sorpresa ya que no sabía que me había pasado y que hacía con un doctor; no recordaba nada mucho menos si tenía a alguien en este mundo, así que para comprobar si tenía familia o no, volví a retomar la palabra.

-¿Qué me paso? ¿Qué hago aquí? ¿Y mi familia?- no podía quedarme más tiempo sin saber que me había pasado en realidad y que hacia aquí.

-estas aquí porque tuviste un accidente automovilístico en el cual iba toda tu familia- al escuchar accidente me quede en shock pues las palabras que decía el medico no paraban de sonar en mi mente, lo que me llevo a estar de nuevo consiente fue la palabra Familia; eso quería decir que no estaba sola como había imaginado, lo que me llevo a otra pregunta.

-¿Y dónde están ellos?...¡ mi familia!- las personas que seguían mirándome se palidecieron al momento de escuchar mi pregunta, y todos voltearon a ver al doctor Tom que al igual que los demás esta perplejo por mi pregunta y se le notaba algo triste en sus ojos, pero no sabía por qué razón hasta que retomo la vista asía mi la cual había alejado cuando todos voltearon a mirarlo.

- eso a mí no me incumbe informarte- sus palabras fueron secas y algo rígidas como si lo que me tendría que decir fuera algo malo.

-¿y a quien si le incumbe? ¡Necesito saber que pasa!- frustrada por la ansiedad de saber que me ocurrió mi tono de voz altero al doctor y los que lo rodeaban, su mirada fue disminuyendo su intensidad pero al hacerlo ni un segundo aparto la vista de mí.

- ¡La persona exacta para decirte lo que quieres saber no está en estos momentos Blake!- su reacción me tomo por sorpresa, y trague duro, ya que por ningún momento se me pasó por la cabeza el saber mi nombre, dejándome más ansiosa de saber lo ocurrido, el motivo por el cual me encuentro observada; lo único que quería en estos momentos es comprender que ocurre y seguí continuar con la sesión de preguntas que cada segundo que pasa se vuelven sin sentido.

-¡Entonces mi nombre es Blake!- las palabras de mi boca salieron sin más preámbulos y seguí con mi interrogatorio

- ¡necesito respuestas ya! Quiero entender todo, no me gusta ser observada- al decir eso no pude evitar mirar a los acompañantes del doctor que ni siquiera me an dicho al menos una palabra, solo mirarme como un fenómeno.

-sí, tu nombre es Blake Milton, y eres una paciente de este hospital y el motivo de nuestra visita es que despertaste de un supuesto coma, que para la gravedad de tus golpes en el accidente deberías haber estado en ese estado vegetativo por mucho más tiempo que solo 3 días, y mis compañeros te miran de esa manera porque eres un milagro.- las palabras del doctor me sacaron de mis propios pensamientos asiéndome asimilar todo para seguir oyendo más; mi nombre es Blake Milton y estuve en estado vegetal por 3 días y según las palabras del doctor Tom soy un milagro.



ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO A PESAR DE SOLO SER EL PRIMER CAPITULO, ES MI PRIMERA OBRA NO SEAN TAN DUROS CON MIGO Y SI LES GUSTO NO SE OLVIDEN DE VOTAR Y COMENTAR Y POR SUPUESTO RECOMENDARME :D

GRACIAS XOXO

"Los espejos se emplean para verse la cara; el arte para verse el alma" :3


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