Rara ¡¿Dónde? ¿Yo?!

Capítulo 8

_Simplemente no quiero hablar contigo, es más con nadie_
_Eres una ingrata sólo éso eres, de un día para otro decides dejar de hablar conmigo, como si nada, sabes que, no puedo obligarte a que me sigas hablando, si quieres irte vete, deja de hablarm... ¿Abby? ¿hola? ¡Ey! ¡COLGASTE! -

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Ya no veia a Austin en la escuela, había dejado de tomar las clases a las que juntos nos inscribimos y tomábamos desde el inicio de la secundaria, también llegue a escuchar rumores de que cambiarían su lugar de residencia y sus padre atravesaban una crisis matrimonial, pero de seguro era algo...
Estaba en casa, más precisamente en mí habitación, la tensión que me provocaba la angustia y las tremendas ganas de llamarlo o siquiera escribirle me dejaban con jaqueca, así que tome unas pequeñas pastillas de la mesita de noche de mis padres, justo debajo de aquella vieja lámpara que mí padre en muchas ocasiones quiso cambiar, pero cada vez que intentaba hacerlo, entraba en una pequeña discusion con mí madre, siempre era lo mismo, mí madre con su típico discurso de la economía de nuestro hogar y mí padre siempre en posición de contra ataque...
Dormí un rato, de reoente una sombra se reflejo en mí sábana y sentí algo a los pies de mí cama, mire suavemente y era él, él estaba ahí.

Narra Austin

Yo insiste mucho en que no, no quiero abandonar este lugar, aunque no me hables eres una razón de muchas para no poder irnos, dime si me voy ¿Me escribirás?, sabes desde que dejaste de hablarme han pasado muchas cosas, necesito hablar con alguien y tú eres la única persona con la que puedo abrirme totalmente...

_Ahí estaba él, al costado derecho de mí cama, no podía decir ni una sola palabra, él hablaba más retóricamente que conmigo_

Abby te extrañare mucho, quien me aguantará, ¡No has hablado en todo el rato! ¡No sé ni qué hago acá! Es claro que ya no hago parte de tú vida, sólo cuidate y no comas mucho chocolate... A y escucha bien, Abby, nunca, nunca, dejaras de ser mí mejor amiga, aunque yo ya no sea tú mejor amigo...

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Austin parecía realmente decepcionado cuando dejó la habitación, aún después, cuando ya no estaba, intente decirle "Te quiero, eres mí mejor amigo" pero ni eso pude decir, estaba temporalmente muda.

Esa noche y la siguiente, es más y toda esa semana no pude consiliar el sueño, la escuela ya no me causaba gracia, sólo iba como una sombra en una intemperie llena de oscuridad, aquel chico de cabellos rojos y ojos color almendra, se había marchado, Austin ya no estaba, como me había dicho una semana antes, sus padres aunque habían superado su crisis matrimonial, resolvieron que ya no era lo mismo y vieron como la mejor solución la separación, su padre se quedaría acá por su trabajo, pero por el contrario su madre, ella simplemente se fue junto con él...
Todas las tardes al llegar de la escuela revisaba el correo, aún guardaba una pequeña esperanza de que Austin enviara siquiera una carta...
Ya no eran semanas sin vernos, ya eran años, dos exactamente...
Pero no solo pasaron años, aquella Abby de playeras y sudaderas ya no existía. ¿Qué sucedió? Bueno retomemos:

-Ya era un año sin Austin, desde Helena hasta amigos de infancia ya no estaban, simplemente por razones que aún no logro entender, todos se alejaron...
Pero hay algo que tengo muy presente aún, y es aquel mensaje de Helena diciendo que ya no quería hablarme más. Ni una palabra más ni una menos, sólo éso. Ése día término todo aquello de Abby que Austin conoció, desde lo que vestía, hasta lo que pensaba... Y ¿Austin? Olvide esa idea, y logre convencer a mis padres de cambiar de residencia...
Casa nueva, vida nueva, aunque de escuela no cambie, ya estaba en último año y mí madre lo prefirió así.
Aún hablaba con Daniel, él continuaba siendo mí amigo, aunque tengo que aceptar que fue difícil que se acostumbrará al cambio de Abby aunque nada me cuesta admitir que con él nada cambio, en nuestros ratos libres solíamos jugar fútbol, bueno él jugaba yo simplemente lo observaba...
En mí forma de vestir bueno, utilizaba shorts cortos y playeras abiertas hasta la cintura para dejar relucir el cuerpo que tanto me costó, sí ese año ingrese a clases de Spinning, obteniendo el cuerpo que nunca quise, y usar la ropa que siempre repudie por eso mis ideas también cambiaron, aunque siempre el respeto por mí estuvo presente...

Posdata: #21 te amo...! ♡