ridiculous

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Mis días se basaban en pensar en Nacho y en la no-comida.
Y esas dos cosas tenían en común algo: ninguna me hacía bien.
Me cagaron la vida.

Pero la diferencia entre no comer y él, era que si no comía al menos iba a ser flaca, en cambio si no lo tenía iba a morir de tristeza.
Es gracioso porque tenía 12 años y creía que él era mi vida entera, y que nunca más iba a amar alguien más aparte de él: ridículo.
Pero, ¿en qué piensa uno cuando tiene 12 años? Tal vez una nena normal a esa edad piensa en amigas, juegos, pintarse, ver películas, no sé. En cambio yo pensaba en mi amor no correspondido y en no comer para no engordar.

Insisto con que nunca fui normal. Nunca voy a serlo.
Nací para repugnarme y odiarte toda la vida.

✖too many calories. ✖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora