Simétricamente asimétrico

Cap.1. ¿Y por qué no?

Y se suponía que el amor es un sentimiento precioso... pero si es de una persona así, tan poco simétrica , él es todo lo contrario a mi... si, habéis oído bien, es un chico...

No se ni cuando me empezó a atraer, pero me gusta, y quisiera que no fuera así. La cosa esta en que cada vez sufro mas por su culpa, este sentimiento es muy raro, y me siento diferente a como me siento normalmente...

Yo iba caminando por la calle para ir a casa de Black Star , para entregarles unos ejercicios, porque había faltado. Y si os preguntáis si yo quería ir...¡ pues claro que no! Esto es una tortura.
Al llegar a su casa, la puerta estaba abierta. No tuve mas remedio que entrar, porque contra menos tiempo tardara, mucho mejor.

-Kid? - Un cosquilleo recorrió mi espalda... era él.

- Ah! Ehh...hola! Vine a traerte los deberes de hoy -

-Vale...ahora mismo iba a salir ¿te acompaño a tu casa?- me preguntó , pero se veía muy raro en él.

- Como quieras, y eso suena raro de ti. -

- De nada! Es todo un honor que te acompañe EL GRAN BLACK STAR JIA JIA!! - ahora si era él... creo que prefiero mas el otro.

Ibamos caminando por la calle, él y yo solos, los únicos por la calle, todo era raro, me sonroje.

Kid, tienes fiebre? Estas muy rojo! -dijo mientras pasaba su mano por mi frente para tomar la temperatura .

- Estoy bien, chaval! - dije aún mas sonrojado. Era raro en él, pero cierto...

- No, no tienes fiebre ¿te encuentras bien? - puedo notar que cada vez esta más preocupado.

- ¡ Que si estoy bien, dejame! , demonos prisa, quiero llegar pronto a mi casa, estoy cansado - trataba de esquivarlo, no quiero que note que le gusto.

Él se acercó a mi - Kid, te noto raro, estoy preguntando en serio! -seguía acercándose.

Esto es muy raro, él no se preocupa por nadie . Creo que lo sabe y quiere reírse de mis sentimientos.

- Kid, yo... - dijo Black Star sonrojado con voz tenue.

-¡¿Qué?! ¿Qué quieres Black...? -

Él se acercaba lentamente - Kiddo~kun... -

- ¿Kiddo-kun? ¡Tío, estas muy raro ! - Dije yo ya al límite, no podía más. ¿Se estará riendo de mi?

Entonces, él me abrazo...