Estamos en una edad difícil. Nuestros padres crean imágenes inexistentes de nosotros mismos. Nosotros a la vez intentando encontrar nuestro destino. Confrontándonos unos a los otros intentando entendernos. Padres entiendan que sus hijos son adolescentes. Sus hijos se chocaron con un nuevo mundo, con algo totalmente desconocido. Dejaron de ser niños y sintieron la acumulación de nuevas obligaciones. Ustedes pasaron por lo mismo! Intentan que sus hijos no cometan sus mismos errores pero los privan de una realidad que no puede ser esquivada. Somos humanos, podemos equivocarnos. Y tenemos todo el derecho del mundo a hacerlo! Si como ustedes mismos dicen, verdaderamente buscan nuestra felicidad entonces dejennos hacer, intentar, soñar. Dejen que cometamos errores. No confronten, escuchen. Si quieren que nosotros, sus hijos, les contemos lo que hacemos a diario, deben darnos CONFIANZA para ello. Porque un vinculo sin confianza no es un vinculo. Si nos aman, escuchen lo que tenemos para decirles. Otorguenos espacios para dialogar, fuera de su vida agitada.
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