Help|Jerrie Thirlwards|.

Capítulo final.

*16 años después*

Emma's pov.

Ya estaba a punto de anochecer y mamá aún no llegaba, estaba en su ida al muelle de todos los días, me gustaría saber qué diablos iba a hacer allí. Estaba sola en casa, esperando a que llegue ya que hace poco había muerto la abuela Maura, y mamá no estaba para nada bien. Ella era una mujer muy buscada por las mujeres solteras y los hombres, pero ella seguía siendo fiel a mi madre biológica, a quien nunca conocí pero según mamá era un gran chica. Estaba en el sofá de la sala mirando televisión cuando la puerta se abrió y mi madre con una gran sonrisa como la de todos los días apareció por la puerta.

-¿Cómo esta mi princesa?- me dijo muy feliz.

-¡Mami!- dije bromeando como una niña chica.

-¿Cómo estas pequeña?

-como hace una hora cuando te fuiste, mamá me saludas como si te hubieses ido por un año.

-Okay perdón, lo olvide ya eres una chica grande que tiene novio y no quiere más a su madre ... lo siento- dijo en burla.

-Está bien mamá, te prefiero a ti antes que a Bill.- dije saltando a sus brazos.

-Esa es mi chica...

Podría decirse que yo era una chica bastante popular, hija de la gran psicóloga Jade Thirlwall, pero algo me molestaba mucho; todos sabían la historia de mi madre, pero yo aún solo sé que su segundo nombre es Louise no lo sé porque me lo dijeron si no porque es mi segundo nombre. Nunca me anime a preguntarle a mamá que fue lo que le sucedió pero creo que ya era hora.

-Mamá- lo llame desde el salón.

-¿Qué necesitas?- cada vez que la llamaba se ponía nerviosa, pues, cuando me desarrolle ella no sabía qué hacer, estaba muy nerviosa, asi que llamo a la abuela Maura, por eso cada vez que la llamaba se asustaba. Ella parecía todo un hombre.

-creo que ya estoy un poco grande ¿no lo crees?

-Ay por dios... ¿Qué me vas a decir Emma?- dijo tomando su rostro- por favor no me digas que ya... no... por favor, no puedo perder a mi bebita...

-¡No mamá!- dije riendo, es otra cosa.... Es sobre mamá biológica- y su rostro cambió por completo.

-¿Qué sucede Emma?

-Podrías contarme sobre ella...- dije he hizo una pausa.

-Okay... tienes razón ya tienes la edad suficiente- dijo sentándose a mi lado- ella era más chica que yo, era una de mis pacientes; se odiaba a sí misma, se auto lastimaba y vivía en un mundo completamente diferente, que para los demás era cualquier cosa pero para mí era admirable... Conseguí entrar en su mundo de una forma increíble y bueno, nos fuimos enamorando...

-¿Qué le sucedió?

-Murió de cáncer una semana después de que naciste.... Ella te amaba...- y note que una lagrima cayó por su mejilla, yo le prometí que ella iba a estar todos los días de tu vida...

-otra pregunta mamá, ¿A dónde vas todas las tardes?- pregunté algo quebrada.

-Con tu madre todos los días íbamos a ese muelle, allí nosotros éramos nosotras, es muy difícil de explicar, algún día sabrás de que hablo.

-Mamá, siempre estaré para cuando lo necesites.- ella solo se levanto y me abrazó.

-estas cada día más igual a tu madre- dijo abrazándome.

Jade's pov.

No lo podía creer, no quería que eso suceda, no quería que Emma se enterará, pero tenía razón ya era grande, ya se lo merecía. Cada día estaba más igual a Perrie, su cabello, sus facciones sus ojos seguían siendo los míos, cada vez que se enfadaba conmigo, ponía la misma cara que Perrie. Ella había crecido como una niña sana, podría decirse que lo hice bien, ella nunca mostró tristeza de mi parte y siempre me contó todo, nunca le costó consultarme algo. Era la hija perfecta, era mi hija.

Una vez que me retire de la sala, subí a mi oficina donde allí abrí mi cajón donde saqué esa ficha que tanto me lastimaba:

Ficha de paciente numero 24

Nombre: Perrie Louise Edwards.

Edad: 17 años.

Antecedentes: ninguno.

Asistencia a otros psicólogos: cuatro psicólogos.

Causa de visita: Problemas psicológicos.

Nota de último tratamiento: La paciente no está loca como demostraban notas anteriores, ella se presenta en un mundo donde todo es como ella desea, es un mundo maravilloso. Mi método funciono, ella me permitió entrar en su mundo. A medida de las sesiones a comenzado a superarse de una forma notoria, ya no ignora, todo lo contrario, se deja amar.

Conclusión: La paciente solo necesitaba a alguien más en su mundo.

Familia: Hermano, abuela marido e hija.

Nacionalidad: Estadounidense.

Estudios y notas: excelentes.

Nuevo psicólogo: Dra. Jade Thirlwall.

Intención de nuevo psicólogo: entrar en su mundo.

Caso perdido a causa de: La paciente al superarse sufrió de la enfermedad conocida como cáncer.

Cada vez que leía esas notas, mi alma se destruía, siempre recordaba como ella entró a mi oficina odiándome, pero lo logré, ella me mostró su mundo, nunca me arrepentiré de ello. Ahora continuaba con ella en mi corazón, Emma era la razón de mí existir, debía cumplir mi promesa, de seguro Perrie hubiese hecho lo mismo. Aunque costó, logré seguir adelante junto con Emma, nada fácil pero no imposible.

Y allí estaba todos los días dirigiéndome hacia ese muelle donde al ver el agua recordaba a Perrie allí dentro a mi lado, abrazándome. Cada vez que me sentaba recordaba aquel primer beso y sus tímidas palabras, todo me recordaba a ella.

Al dejar la ficha en donde iba, comencé a observar mis estantes y no podía parar de mirar esos retratos de lo que fue una vida junto a Perrie y lo que es una con Emma, allí habían fotos mías y de Perrie cuando éramos adolescentes, cuando ella aún estaba a mi lado, habían muchas con Emma, pero la que mas valoraba era un retrato que tenía una foto de Perrie sonriendo, y a un lado de la foto una nota escrita por mí que decía: " El sol sale todos los días para iluminarte" esa frase me inspiraba a levantarme todas las mañanas.

Al lado de ese retrato había otro que era una foto de Perrie sin cabello pero igual sonriendo junto a mí, su sonrisa tan viva.. Cada vez que miraba estas fotos deseaba volver el tiempo atrás, en esa oficina era en el único lugar que podía estar triste ya que le había prohibido la entrada a Emma. Unas lágrimas comenzaron a caer por mi mejilla al ver una foto de Emma en brazos de Perrie, éramos tan felices. Pero tan pasmada en mis pensamientos sentí que alguien tocaba mi hombro, era Emma con cara de preocupación, por dios, no la había escuchado entrar.

-Mamá ¿Estás bien?- pregunto muy preocupada.

-si hija- dije limpiando mis lagrimas.

-Era hermosa- dijo mirando el mismo retrato que yo miraba- " El sol sale todos los días para iluminarte"- dijo leyendo la nota- ¿Qué significa eso mamá?

-Eso me decía tu madre, yo siempre le decía que ella era mi sol que al principio, cada vez que me acercaba a ella, se ocultaba al anochecer, pero ella una vez, me contesto eso...

-¿mamá, cómo hiciste para seguir?- preguntó curiosa.

-No me rendí, a veces cada uno debe buscar su final feliz, y tu madre es el mío.- dije en una risa ahogada.

-o sea que ella sigue aun con nosotras- solo asentí y me di la vuelta para abrazarla.

-Ella siempre estará con nosotros...