¡Bienvenidas a Quito!

16 2 0
                                    

POV Jess

Manejé cerca de 4 horas, al principio un poco perdidas por la carretera y encima la preocupación que llevo. Espero que no reporten el auto, eso me traería demasiados inconvenientes.
Me agradaba el hecho de estar haciendo esto con mis amigas, quiero decir... Jamás imaginé que esto iba a ocurrir, Angie se arriesgó, mejor dicho todas nos hemos arriesgado demasiado con el simple acto de estar en una carretera con destino a Quito sin consentimiento alguno de nuestros familiares.

Y entonces yo le dije -cesó entre risas para ponerse seria Keyla- Papito, usted es feo, chiro, celoso e infiel y mucho defecto junto como que no va conmigo. -en seguida estallaron en carcajadas incluyéndome- es que sí, todavía que tuviera el cuerpo del papasito de Diego, Uff -fingió tener calor mientras se abanicaba con las manos-

Que tremenda eres mujer -dijo con tono divertido Angie- me acuerdo cuando Jess te lo enseñó por primera vez en fotos y tú ¿qué dijiste? ¿Ah ah? -su tono aún era divertido pero esta vez con un toque inquisidor-

Ya -expresó resignada Keyla- es que no era su mejor foto pues, no le favorecía esa foto. -se excusó la morena sensual y curvilínea-

Y mira, ahora estás loquita por él -expresé en mi tono divertido- y Angie está loquita por Luis.

¡¿Qué?! -se quejó la castaña- ¡JA! Ni hablar, a mi no me atrae para nada ese hombre.

Keyla parecía tener la misma mentalidad que tú y mirala ahora
-inquiri- hasta le dice "Mi esposito" -Angie quedó pensativa- tiempo al tiempo -dije melodiosamente sugiriéndole-

Bah -soltó sin interés Angie- realmente no me importa, en serio.

Chicas, ¿y si dejamos este tema para ponernos a pensar en nosotras? -preguntó Mishel y seguido todas emitimos una exclamación "Viiiiiiii''. Mishel achinó sus ojos- en ese sentido no me refería, chistosas.

¿Entonces? -preguntó confundida Keyla-

¿Qué vamos hacer a Quito? En una ciudad donde prácticamente no tenemos a nadie, alguien que nos pueda apoyar, ofrecernos posada o algo por el estilo. Porque asumo que nos quedaremos solo un fin de semana. -Angie y yo nos miramos cómplices- podríamos pagar un hotel y...

Tú tranquila -interrumpí sus dudas, Mishel se puso intensa, realmente me desconcierta todo lo que pregunta y es que en parte tiene razón ¿Qué haríamos? No obstante decidí mantener calma para que ella no se sienta ¿preocupada?- no tienes que preocuparte, mientras estemos las cuatro juntas estaremos bien. -Angie quien observaba uno de los retrovisores me dedicó una mirada antes de haber concluido la última frase y me sonrió-

¿Qué tal si paramos en esta gasolinera? -sugirió Angie y todas estuvimos de acuerdo, a parte teníamos hambre, ya faltaba menos de 30 minutos para las 6am-

Keyla y Mishel se encaminaban al "On the run'' para hacer los pedidos mientras Angie y yo seguíamos en el auto para ponerle gasolina. Un chico algo simpático nos atendió, me causo gracia su torpeza, parece que se ha intimidado con nuestra presencia. La manguera se le enredó varias veces, Angie y yo no pudimos evitar reirnos, una vez terminado su trabajo le pagamos, parqué el carro y enseguida nos bajamos.
Las chicas ya habían pedido por nosotras, debo admitir que el sándwich de pollo estaba exquisito.

Esto esta buenisimo -dije mientras mascaba- o ¿será el hambre?

No, si esta delicioso -confirmó Angie mientras absorbía un poco de su gaseosa-

Lo sé, siempre lo pido cuando vengo a uno de estos -Keyla se refería al lugar- sabía que les encantaría. -todas asentimos- bueno, yo invité ustedes pagan.

Ja ja ja, graciosa -dije mientras estaba rebuscando en mi billetera pero Angie me detuvo- ¿Qué ocurre?

Yo pago, tu ya recargaste gasolina -seguido ya estaba rebuscando en su billetera-

¿Qué hacen? -preguntó confundida Keyla- ya pagué, bobas. -dijo mientras rodaba los ojos- aquí se paga cuando haces la orden -ambas la miramos con cara de "¿Me estás jodiendo?"- vámonos bonitas.

Keyla se levantó del asiento, Mishel imitó lo mismo, yo quería descansar un poco más pero Angie se encogió de hombros para luego levantarse e ir al auto.

¡Espera! -la detuve- ¿sábes conducir? -asintió comprendiendo mi petición, le entregué las llaves y nos en caminamos al auto-

¿Vas a conducir amiga? -preguntó Mishel al ver que Angie y yo cambiamos de asiento-

¡No! Solo está calentando el puesto de Jess para que su trasero no tenga frío -contestó con sarcasmo Keyla- obvio que va a conducir pues, preguntas lo obvio.

De hecho, si va a calentar mi asiento, tengo mucho frío -sone convincente y Keyla pareció quedarse fría mientras Angie, Mishel y yo nos reíamos por la cara que había puesto- no, mentira. No te enojes, trataba de ser sarcástica contigo.

Bueno bueno -dijo con tono resentido Keyla- Angie no choques el auto.

No lo hará. -dije con severidad- cuidará al auto como si fuera su vida -esta me miro con una ceja enarcada-

¿Nos vamos? -preguntó y yo asenti seguido de eso aceleró y reanudamos el viaje nuevamente-

***
Te dije que era mejor ir por la otra vía -me regañó Angie-

Es que no conocía -me excuse, de igual manera ya habíamos casi llegado al destino-

Baja la velocidad, me estoy mareando -se quejó Keyla-

Estás embarazada -decidí molestarla un poco-

¡Ja! Ni hablar querida. -se defendió-

Oh oh. -Mishel emitió ese sonido y nos preocupamos- hay policías ahí -señaló frente a nosotros- ¿tienes licencia?

¡Mierda! -se quejó Angie, esto ya era preocupante-

Tengo un plan -ofreció Keyla, presiento que no es algo favorable- sobornarlos.

No podemos darnos el lujo de gastar dinero en sobornos así, creo que apenas contamos con lo necesario -expresé mi punto de vista-

Ella tiene razón -habló Angie mientras disminuía la velocidad y como aún habían algunos carros adelante, ambas nos miramos...creo que hemos tenido la misma idea.- cambiemos de lugar.

Inmediatamente como pudimos nos cambiamos de puesto, por suerte hubo bastante tráfico, esta vez el tráfico me ha beneficiado. Observé a Keyla por el retrovisor, ésta rodaba los ojos.

Ustedes se complican la vida de por gusto -espetó- yo hablaba de sobornarlos usando nuestras tácticas de coqueteo -bufó aburrida-

Ay no -se quejó Mishel- yo no me prestaba para eso.

Ni yo -habló Angie-

Yo peor -dije-

Keyla nuevamente se había quedado fría

Hey, presiento que este jueguito que consiste en el que nadie este de acuerdo conmigo no me gustará nada, nada, nada -se quejó- pero igual las quiero chicas.

Todas nos reímos, ya era nuestro turno, el oficial pidió documentos, por suerte todo en orden, pero de igual manera me percaté que estaba hecho el galán aunque no le di la mas mínima importancia. Lo último que dijo fue lo único que me agradó

<<Bienvenidas a Quito>>


Chan chan chan chan!!!

Les gustó?
Por favor NO olviden
VOTAR y COMENTAR!

Besos!!!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 30, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Una vida sin controlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora