Nebol

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Aunque te dañe, no me odies, porque soy humano y propenso a equivocarme.Así rompa tu corazón, no me esquives, nunca lo he hecho con intención, nunca fue mi deseo.¿Me odias, aunque sea a veces?Porque así lo siento, cuando la penumbra se cierne sobre el frío viento otoñal, y el brillo de las luciérnagas se deciden a iluminar mi jardín.¿Acaso aún me amas en secreto?Así mi espíritu se encuentre devastado; mi cuerpo, arrepentido; y mis ojos derramen un último aliento, llamando a tu nombre; sabrás que yo lo hago.Yo, que he caminado sobre las playas más hermosas, sintiendo el cosquilleo de las conchas bajo mis pies.Yo, que me he embriagado con el más dulce de los arcángeles, y aspirado el negro humo de la derrota.Y yo, quien sufre por tu indiferencia aparente, asomándome por la ventana, con tu sangre en mi frente, me rendiré ante los placeres mundanos y efímeros; llorando noche tras noche, trasnochando lágrima tras lágrima, pues he caído rendido a tus pies, deseando nunca haberme separado de tus labios.


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⏰ Última actualización: Oct 01, 2015 ⏰

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