No sé cómo pudo pasarme esto.
De todas las personas en el mundo por qué a mí y lo peor es que él, ni yo nos podemos ver ni en pintura.- Puedes dejar de caminar de un lado al otro como una histérica- paro de caminar y lo miro hay sentado como buen fresco.
- Histérica, me llamas histérica -me paro enfrente de él y lo apuntó con el dedo- que no se te olvide que esta situación es tu puta culpa.
- Lo se no tienes que repetírmelo, joder - se levanto y se acercó a mí.
- Lo sé - lo imito - El no se no va a solucionar nada.
- tampoco que estés gritando como loca - se acerca más a mi.
- y que esperas que haga que te aplauda- la ironía en mi voz se escucha y me mira molesto- es que no El Niño no pudo evitar meterse a donde no debía si no que también me termino empujando a mi.
- haber las cosas tampoco fueron así y lo sabes- me contradice
- entonces cómo fueron- me cruzo de brazos- es que yo por su puesto me metí en el bote y lo solté para que empezara a navegar en la deriva para iniciar nuevas aventuras con un idiota que no piensa en nada más que lo que le cuelga entra su piernas - me giro y me empiezo adentrar a la vegetación.
- espera un minuto si yo no te hubiera metido en ese mismo bote en estos minutos estarías metidos en una pequeña celda con montón de chicos ebrio y drogados- el me sigue tratando de detenerme.
- pues déjame decirte una cosa idiota- me giro para poder encararlo- hubiera preferido estar en esa celda con todos esos chicos, que contigo perdida en una puta isla sin teléfono, sin comida y lo peor sin forma de regresar a la civilización.
- se que no fue el plan más elaborado que e tenido pero yo no contaba que el bote se soltara y nos alejáramos tanto- se justifica- además yo no te obligue a que te quedaras en el bote.
- a donde querías que fuera- me acerco a él y lo empujó- estabas encima mío que no ves el tamaño que tienes comparado con el mío
- bueno en algo estamos de acuerdo- se ríe de mí.
- Ash eres desesperante que no ves en la situación que estamos- lo vuelvo a empujar pero no logró que se mueva ni un centímetro. Como dije ese tipo era enorme; alto, bronceado, de cabello castaño y una sonrisa de comercial, el típico capitán del equipo de fútbol de la secundaria.- deja de hacer eso-
- porque te molesto- lo trato de empujar de nuevo pero él me agarra con sus grandes brazos y yo forcejeo para poder soltarme.
En todo esa pelea entre él y yo, tropezamos, el cae encima mío pero sus brazos evitaron que todo su peso me cayera encima mío.
Empiezo a moverme como gusano tratando de quitármelo de encima pero no logro.- quieres quitarte de encima- le digo
- lo haré solo si te tranquilizas y pensamos en una manera de salir de esto- sus ojos azules me miran y yo me rindo.
- de acuerdo- suspiro
El se levanta y me tiende la mano para ayudarme pero lo ignoro. Me levanto y sacudo mi ropa.
- regresemos a la playa por si vemos un barco o algo- le digo y empiezo a caminar, el me sigue.Cuando llegamos a la playa el basto océano nos recibe. Suspiro y me siento en la arena con los brazos cruzados.
- puedes dejar de actuar como una niña no resolvemos nada actuando así- se sienta a lado mío.- yo actúo como se me pegue la gana Cooper- lo miro con indiferencia- haber genio empieza que podemos hacer.
- esperar hasta que un barco o un avión nos venga a buscar - él empieza a recostarse en una palmera y se queda dormido.
Yo suspiro y miro como el sol que empieza desaparecer en el océano.
Como es que estoy metida en esta situación. Bueno es sencillo.
En mi secundaria como viaje de fin de curso para los que se están apunto de graduar. Decidieron ir a una isla de Caribe, todo era fantástico la playa, el hotel, etc. A pesar de que yo no llevo muy bien con los de mi promoción, mi tía pensó que era un buen motivo para distraerme y quitarme el estrés de los exámenes finales.Pero mi tía no contaba que todos estos adolescentes hormonales se les ocurriera la magnífica idea de rentar un yate y hacer una fiesta en el.
En ese transcurso de la fiesta una tormenta nos atrapó. El idiota que esta a lado mío me hizo entrar en un bote salvavidas que estaba aun costado del barco pero lo que no contaba el genio es que el bote este mal amarrado y se soltó dejándonos a la deriva y sin formas de regresar.
Cuando la tormenta paso estábamos a las orillas de una isla que para muestra suerte.
Es una puta isla desierta.Ah y que es lo que hacemos, dormir.
El Hijo de puta que me metió en esto solo se quedo dormido. Mientras que yo quiero estrangularlo hasta que se ponga morado.Dios, el frío es tanto que empezó a temblar.
- tienes frío- en qué momento se levantó pienso .- no es que me gusta imitar a las maracas- le digo con sarcasmo.
- primero el sarcasmo no te queda- se levanta y sus brazos me rodean por la cintura- y segundo mejor cállete y duérmete.
Sé que mi cara debe estar roja, nunca fui buena con la cercanía de las personas.
- suéltame- me muevo
- no y quédate quieta que así entraremos en calor más rápido, hace mucho frío como para que sigas jodiendo- me mira molesto
Me rindo y me acomodo mejor en sus brazos.
Cierro los ojos y el sueño me vence.