Reawaken...(Hush Hush)

Capitulo 11.

Desperté en una cama, no tarde mucho en darme cuenta que estaba en la casa de Patch después de ver toda la habitación, no cabía duda alguna que había sido Patch quien me había rescatado.

Me sentía mal, me dolía la cabeza y mis piernas. Estaba muy confundida, hasta que recordé que era lo que había pasado, inmediatamente el pensamiento de donde estaba Scott me aterraba, sabía que Scott a Patch no le caía muy bien y tal vez el no lo había ayudado, pero nuevamente me tranquilicé, Patch no sería capaz.

Intenté pararme pero no pude, mis piernas se sentían muy débiles y por más que yo tenía la capacidad de curarme rápido, mis piernas no estaban bien del todo todavía.

Me senté en la cama e inmediatamente Patch apareció desde el marco de la puerta, su mirada reflejaba preocupación.

Vino hacía mi y me rodeo con sus brazos.

—Gracias.—Susurré yo aún en sus brazos.

El me miró con confusión y preguntó.—¿Porqué?—

—Por sacarme de allí, por cierto ¿Cómo sabías que estaba allí?— Dije y lo besé, el casi al instante me correspondió.

Cuando nuestro beso termino respondió—Larga historia—

Asentí y pregunté.—¿Y Scott?—

El frunció el ceño y respondió.— Scott está inconsciente en el suelo de la sala de estar.—

—¿En el suelo de la sala de estar?—Pregunté con total incredulidad.

—Si, apestaba a alcohol y no pensaba dejar que mi sillón tuviera olor a vodka por un imbécil, así que pensé que el suelo era la mejor opción.— Dijo con una sonrisa de orgullo en su rostro.

Cuando iba a responder con alguna grosería hacía Patch por ser tan tonto al hacer eso, escuchamos un gemido de dolor desde la sala de estar.
Fuimos hacía ella para ver a Scott con cara de frustración y confusión en su rostro, sentandosé en el sillón.

—Tanto esfuerzo para nada.—Susurró Patch con molestia señalando el sillón.

Reí y caminé hacía Scott.—¿Te encuentras bien, Scott?— Le pregunté apoyando la palma de mi mano en su hombro.

—Quitándole que mi cabeza y piernas duelen como el mismismo infierno, que no sé porqué estoy aquí y que norecuerdo mucho de lo que ha pasado y que las cosas que recuerdo megustaría olvidarlas...si, me encuentro perfectamente.— Dijo derramando ironía en cada palabra que pronunció.

—Tonto.— Dije mientras le pegaba amistosamente el hombro.

El hizo un gesto fingido de dolor, a lo que yo reí.

El celular de Patch sonó.

—Dabria.—contestó, a lo que yo inmediatamente fruncí el ceño. ¿Por qué tenía el número de Dabria?— Si, lo sé...¿se puede saber cual es?—gruñó.— Está bien, en unos 10 minutos, aquí.— luego de decir eso colgó.